Kingfisher Airlines se queda sin licencia

A finales del mes de octubre, la Dirección General de Aviación Civil de India suspendió la licencia de operador aéreo a la compañía Kingfisher, luego de que la endeudada aerolínea no diera una respuesta satisfactoria a las inquietudes del ente regulador sobre sus operaciones, suspendidas desde principios de mes debido al plante de su personal por falta de pago.

Dos semanas después, la compañía fue advertida de que perdería su licencia si no presentaba un plan de reactivación, ya que el Gobierno indio no se la renovaría si no presentaba un proyecto de reestructuración a finales de diciembre.

Kingfisher Airlines se queda sin licencia

Ahora, el ministro de Aviación Civil indio, Ajit Singh, ha pedido a la compañía aérea que trabaje por el bien de sus empleados, las partes interesadas y los viajeros, al considerar que si la aerolínea no recupera la actividad el daño colateral será mayor para todos.

Asimismo, ha remarcado que la renovación del permiso no implica volver a iniciar el proceso, como en el caso de nuevos operadores, sino que basta con presentar un plan que garantice la estabilidad financiera de la empresa a la Dirección General de Aviación Civil.

Según las estimaciones oficiales recogidas por los medios indios, los mayores perjudicados si la aerolínea no vuelve a volar serían los bancos que han prestado a la compañía unos 7.000 millones de rupias (97,6 millones de euros), junto con las compañías petroleras a las que aún no se ha abonado el combustible.