Por Forum Business Travel & Events Comunicación, en Innovación

La gamificación es la nueva estrategia para ahorrar en viajes de empresa

3 julio, 2017 (09:20:41)

Las empresas están empezando a emplear juegos e incentivos para que sus empleados ahorren en los desplazamientos profesionales. La gamificación ha llegado a la gestión de los viajes corporativos como una estrategia alternativa a las políticas impositivas y los resultados están siendo muy prometedores, según constatan los travel managers reunidos por Forum Business Travel en las sesiones de junio celebradas en Madrid y Barcelona.


MADRID/BARCELONA, 29 DE JUNIO DE 2017

Bajo el título “La optimización del gasto en los programas de viajes maduros”, los gestores miembros de Forum Business Travel han analizado los retos a los que se enfrentan las empresas con larga experiencia en desplazamientos de sus empleados dentro y fuera de España. Frente a las políticas de viaje rígidas basadas en la penalización, algunas de ellas están apostando ya por prácticas de gamificación para conseguir nuevos ahorros.

“Se trata de aprender y motivar, de adquirir compromisos a través del juego para conseguir que los viajes sean más baratos, para que aumente la productividad y los viajeros se acostumbren en general a realizar sus reservas con mayor antelación a través de las herramientas tecnológicas a su disposición”, comenta Javier Amigo, gestor de viajes de Campofrío Food Group Holding.

Los incentivos pueden ser económicos, pero las empresas también ofrecen días de vacaciones, acumulación de puntos o reconocimientos profesionales de diversa índole. En este aspecto, hay que tener en cuenta la financiación de estos programas. “Se puede optar por diversas fórmulas, aunque lo más habitual es la dotación presupuestaria en función de los ahorros conseguidos o recurrir a patrocinadores. También hay quien combina ambas o contrata servicios externos”, explica Amigo.

“La gamificación exige una cultura empresarial abierta y dinámica”, según indica Óscar García, socio fundador de Forum Business Travel. Además, para poner en marcha un programa de estas características es necesario contar con el apoyo de la dirección y del departamento de Recursos Humanos, estudiar la fiscalidad de los incentivos y poner en marcha una estrategia de formación y comunicación. Otro de los retos es la posible discriminación de los empleados que no viajan, un aspecto que obliga a estudiar medidas compensatorias.

El meollo de toda esta estrategia es la concienciación de los empleados sobre el gasto que generan sus desplazamientos y las mejoras que se pueden obtener con su involucración en los objetivos del programa de viajes, lo que en términos anglosajones se conoce como el engagement.

Como explica Salvador Romero, director de Compras y Servicios Generales del Grupo Cofme, “la implantación de una cultura de control de costes es la mejor manera de eliminar los gastos innecesarios y llamar la atención sobre comportamientos no adecuados potenciando sobre todo la celebración de los éxitos”. Clara Sánchez Picout, travel manager de Sacyr, indice en la misma idea: “la adecuada gestión de la demanda mejora la transparencia en el gasto, alerta sobre la implicación de las acciones individuales y proporciona mecanismos para su seguimiento”.