España: La actividad turística en Cataluña crecerá un 3,6 por ciento en 2002, según la Universidad Autónoma de Barcelona

La actividad turística en Cataluña crecerá un 3,6 por ciento en 2002 y la comunidad autónoma recibirá unos 40 millones de visitantes. Los ingresos ascenderán a unos 10.020 millones de euros, frente a los 9.326 millones de 2001. Estas son algunas de las previsiones del estudio anual sobre turismo que presentó ayer la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). Los mismos datos indican que el turismo creció en Cataluña un 6,4 por ciento en 2001, un 4,5 por ciento en 2000 y un 11 por ciento en 1999. El informe destaca el efecto positivo del Año Gaudí, así como los efectos del 11 de septiembre, ya que zonas como Croacia, Turquía o el norte de Africa pierden turistas en favor de España. La ciudad de Barcelona crecerá por encima de la media de Cataluña, con un aumento previsto del 5,3 por ciento. Las otras dos marcas más importantes son la Costa Brava (Girona) y la Costa Daurada (Tarragona), que tendrán incrementos más modestos del 1 y el 1,8 por ciento, respectivamente. Por su parte, la Costa del Garraf subirá alrededor de un 2,4 por ciento y la del Maresme (Barcelona) crecerá sobre el 6,3 por ciento. Los mayores incrementos de turistas se darán en los Pirineos y las Terres de Lleida, con aumentos del 12,9 y el 17,6 por ciento, respectivamente, mientras que la Cataluña central descenderá un 2,1 por ciento. Por orígenes, los turistas extranjeros tendrán un aumento del 3,8 por ciento, mientras que los españoles y catalanes crecerán por debajo de la media, con un 2,8 y un 3,3 por ciento. El turismo alemán continuará con su tendencia a la baja y, si bien es uno de los más importantes, el estudio estima que bajará un 0,3 por ciento. Entre las mayores subidas figuran los irlandeses (21 por ciento) y los franceses (13 por ciento). El director del estudio y director del departamento de Economía Aplicada de la UAB, Josep Oliver, explicó que las hipótesis en que se basa el informe radican, entre otros factores, en el Año Gaudí, la mejora de la confianza de los consumidores, el aumento esperado del empleo en Europa y el hecho de que será la primera temporada turística sin necesidad de cambiar moneda en la UE. Oliver remarcó como efecto negativo la acumulación de las alzas de precios en el sector turístico. En su opinión, Cataluña "no puede seguir creciendo" a grandes ritmos, por lo que dijo que se está dando un "proceso de normalización de la actividad turística". Según Oliver, la subida del 3,6 por ciento de actividad turística para el conjunto de 2002 "es un buen crecimiento", ya que se sitúa por encima del Producto Interior Bruto (PIB) previsto por este analista, entre el 2 y el 2,5 por ciento.