Entrevista a Betim Budzaku, director general de Andorra Turisme

El reto de transmitir que un país está preparado para convivir con la COVID

Publicada 23/07/20 -Actualizada 20/08/20 02:00h
El reto de transmitir que un país está preparado para convivir con la COVID
  • "Nuestras previsiones son relativamente optimistas para el verano, pero sabemos que la evolución de la pandemia tiene efectos sobre ellas"
  • "Habrá un antes y un después de esta pandemia. El turista piensa ahora dos veces si debe viajar. La toma de decisión es mucho más reflexiva"
  • "Las estaciones de esquí están trabajando con diferentes escenarios para adaptarse a las condiciones que se produzcan a finales de año"

El parón de la actividad turística motivado por la pandemia de la COVID-19 "ha supuesto un golpe para la economía del país ya que el 60% del PIB de Andorra procede del turismo", explica Betim Budzaku, director general de Andorra Turisme. Pero una vez superada esa fase, señala que "encaramos el verano siendo positivos", ya que este territorio "está bien posicionado como destino de proximidad", no solo por la distancia, sino porque "no se producen grandes aglomeraciones y la oferta de naturaleza y actividades al aire libre es lo que buscan ahora los turistas". Asegura que todos los establecimientos y alojamientos cumplen con las medidas de seguridad e higiene, por lo que "el reto precisamente es saber transmitir al turista que un país está preparado para convivir con el COVID con total garantía y creo que Andorra ha hecho un buen trabajo en este sentido".

Una vez superada la fase más crítica de la pandemia de la COVID-19, ¿qué valoración hace del impacto de la crisis sanitaria en el sector turístico de Andorra?

Ha supuesto un parón de toda la actividad. Las estaciones de esquí cerraron antes de terminar la temporada, mientras que los hoteles y los comercios bajaron la persiana de un día para otro ya que la movilidad exterior quedó cerrada al turismo. La verdad es que ha supuesto un golpe para la economía del país ya que el 60% del PIB de Andorra procede del turismo. Eso sí, lo que no podemos olvidar es que la prioridad en aquellos momentos, y también ahora, es la salud pública.

En los inicios de la pandemia no éramos conscientes del impacto y la duración de este parón, era una situación completamente inédita y jamás vivida con anterioridad

Ahora es el momento de la reactivación turística. ¿Qué medidas han tomado para generar confianza en el cliente, el gran reto de empresas y destinos?

Considero que la gestión de la crisis sanitaria por parte del Gobierno de Andorra es una de las mejores credenciales de nuestro país. La claridad con que se transmitieron los mensajes y la eficacia de las medidas tomadas en su momento han sido un excelente punto de partida para la reactivación turística una vez restablecida la movilidad exterior. Además, todos los establecimientos comerciales y alojamientos turísticos cumplen con las medidas de seguridad e higiene establecidas por el Gobierno de Andorra para proporcionar al turista una estancia segura en nuestro país. El reto precisamente es saber transmitir al turista que un país está preparado para convivir con el COVID con total garantía y creo que Andorra ha hecho un buen trabajo en este sentido.

Desde diversos ámbitos se apunta que la tendencia este verano será viajar a los destinos de proximidad. En este contexto, ¿cómo afrontan la temporada estival?

Exacto. Nosotros al planificar la campaña de verano también consideramos que Andorra está bien posicionado como destino de proximidad. Pero no solamente por la distancia sino también porque se trata de un destino donde no se producen grandes aglomeraciones y la oferta de naturaleza y actividades al aire libre es lo que precisamente buscan ahora los turistas.

Nos postulamos como un destino que a priori puede ser atractivo para aquellos que buscan tranquilidad en un entorno natural

En este sentido, nuestras previsiones son relativamente optimistas en cuanto a la temporada de verano pero también somos conscientes de que la propia evolución de la pandemia tiene un efecto directo en nuestras previsiones y por ello, tenemos que estar pendientes en todo momento para actualizar nuestros cálculos. A pesar de todo, encaramos el verano siendo positivos.

Betim Budzaku, director general de Andorra Turisme.

¿Qué novedades podrán encontrar los viajeros?

Este año potenciamos sobre todo la naturaleza. Como he destacado antes, los turistas buscan disfrutar del aire libre sin aglomeraciones. En Andorra, el 90% del territorio es naturaleza y existen rutas de senderismo, ciclismo, deportes de aventura para todos los gustos, actividades en las estaciones de esquí reconvertidas ahora en verano en estaciones de montaña, con Grandvalira, Vallnord-Pal Arinsal y Arcalís, sin olvidar el parque de aventuras de Naturlandia o Caldea-Inúu como opción de wellness. Como complemento, las populares compras y la gastronomía son también una buena opción a tener en cuenta para los turistas que nos visitan.

Las competiciones que siguen adelante este verano, con fechas reajustadas a causa de la pandemia, son la Volta als Ports el 9 de agosto; la Spartan Race del 4 al 9 de septiembre y La Purito el 13 de septiembre. Por supuesto, todas estas competiciones cumplirán con la normativa vigente en cuanto a seguridad e higiene.

¿Cuáles son los principales mercados de Andorra?

Andorra es un país muy conocido por turistas españoles y franceses. De hecho, ambos países representan casi el 80% del total de turistas que recibimos en nuestro país. En concreto, de los más de cuatro millones de visitantes españoles que Andorra recibió el año pasado, casi un 70% proceden de Cataluña, le siguen también la Comunidad Valenciana, la Comunidad de Madrid, Aragón y País Vasco.

Respecto al turismo internacional, acogemos turistas de diferentes países como por ejemplo Reino Unido, Irlanda, Bélgica, Países Bajos, Rusia, Alemania e Italia, enumerando los principales. En total Andorra recibió en 2019, 8.190.860 visitantes.

La oferta de Andorra es muy variada, desde el turismo activo al cultural, el wellness, la gastronomía o el shopping. ¿Cuál es el perfil de visitante más habitual?

Andorra es un destino familiar. De hecho, un 49% de los visitantes españoles son familias con niños. Ahora bien, un 30% son parejas y un 11% son amigos. Existe una versatilidad de propuestas que se adaptan a cada perfil y es precisamente esta amplia oferta turística lo que satisface a estos tres diferentes perfiles de turistas.

Las restricciones impuestas a los desplazamientos obligaron a posponer hasta 2021 el Congreso de Turismo de Nieve y Montaña. ¿Cómo se preparan para la próxima temporada de nieve? ¿Habrá medidas especiales también para la práctica del esquí?

Ése es otro reto que tenemos sobre la mesa. Las estaciones de esquí están trabajando con diferentes escenarios posibles para poder adaptarse a las condiciones que se produzcan a finales de año.

La incertidumbre es la principal variable a tener en cuenta en estos momentos pero vista la experiencia que hemos tenido con el confinamiento y posterior cierre avanzado de las estaciones de esquí, ahora se trabaja con diferentes escenarios en función de cómo evolucione la pandemia.

Lo que está claro es que habrá que adaptarse a las nuevas condiciones, aplicando como mínimo las medidas de seguridad e higiene que sean necesarias

El turismo ha sido una de las actividades más afectadas por la pandemia. ¿Una crisis de este tipo influye de alguna forma en el modo de gestionar el sector? ¿Habrá un cambio en el modelo que se sigue?

Está claro que habrá un antes y un después de esta pandemia. El turista piensa ahora dos veces si debe viajar. La toma de decisión es mucho más reflexiva por las condiciones actuales. Pero no solamente es en este sentido, el sector en sí sufrirá cambios con total seguridad.

La envergadura de estos cambios es ahora mismo impredecible. Muchos comercios, alojamientos turísticos y restaurantes han tenido que adaptarse a la fuerza a estas nuevas condiciones drásticas para su negocio.

Es de esperar que algunos de estos negocios no puedan superar con éxito esta pandemia pero esperamos que la mayoría del sector turístico salga reforzado o que al menos haya aprendido que, ahora mismo, la resiliencia es una de las metas.

Tener la capacidad de adaptarse al cambio constante y salir reforzado es todo un reto y está claro que a corto y medio plazo esta será nuestro challenge

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