Por Manuel Perez, en Hoteles y Alojamientos

La recuperación del sector turístico valenciano tendrá que esperar a 2022

26 abril, 2021 (11:37:35)

Un hecho incuestionable es que la pandemia, lo queramos o no, ha hecho que el sector turístico de la Comunidad Valenciana caiga en picado. Tal es así que las previsiones que se tienen para este 2021 no son nada prometedoras. Así lo señalan varios informes que estiman, a pesar de que nos encontramos solo en el segundo trimestre del año, que los ingresos caerán un 50% con respecto al año pasado.

Una situación generalizada en cualquier destino.

Tras recoger todos los datos pertinentes no solo se ha llegado a la conclusión de que la recuperación no tendrá lugar hasta el año que viene sino que la crisis no ha entendido de destinos.

Con esto queda de manifiesto que absolutamente todos los destinos de la Comunidad Valenciana se han visto seriamente comprometidos, bajando de una manera drástica, entre otras cosas, las reservas en hoteles, hostales y restaurantes.

Cierto es que se han tomado medidas para paliar esta situación y para prevenirla dentro de la medida de lo posible. Sin embargo no han servido de mucho. Esto se debe a que la situación de la pandemia no solo ha sido peor de lo esperado, sino que las medidas de los distintos gobiernos regionales tampoco han ayudado en ningún sentido.

Un futuro que requiere nuevos enfoques.

En un escenario en el que los planteamientos que se han tomado no han servido de mucho, no es de extrañar que los empresarios del sector crean que lo mejor es reflexionar. Una reflexión que pasa, como no puede ser de otro modo, por tomar una nueva perspectiva del turismo valenciano. Es tanto el potencial que sigue teniendo que creen conveniente enfocarlo de otro modo.

El objetivo no es otro que el de hacerlo atractivo para todo tipo de público. De ahí que no se esté dudando en ampliar la oferta actual, en todos los sentidos, que el turista se pueda imaginar. Una maniobra que, por cierto, atiende a una necesidad. Porque, aunque ahora ha sido el momento de llevarlo a cabo, ya se venía experimentando un cambio en las necesidades de las personas que visitaban las provincias valencianas.

Formación y experiencia al servicio del turismo

Esta será una de las combinaciones que más se van a exigir en los próximos meses y, según los expertos, en los próximos años. Las empresas dedicadas al turismo tienen que entender que la formación de vanguardia es la clave para enfrentarse a estos nuevos tiempos. Una formación adaptada y de calidad como la que se ofrece en el Diploma Superior en Turismo Operativo (TUO).

Esta formación tiene que tener como objetivo adaptar el turismo que se conoce actualmente a la realidad actual. Y no solo tiene que ver el COVID. Las nuevas necesidades de los turistas deben abordarse ahora. De lo que se trata es de, según los expertos, no solo recuperar la situación anterior sino de aprovechar este bache para salir reforzado de él y, en consecuencia, poder atraer otro turismo que reporte, si cabe, crasos beneficios una vez se dé por superada la pandemia.

¿Qué es lo que demanda el turista?

Esta es, sin lugar a dudas, la pregunta que está presente en todos los planes de negocio de hoteles, hostales, restaurantes o paradores, entre otros.

El turista del siglo XXI quiere un turismo 360. Quiere disfrutar de su entorno. Un entorno que, en el caso de la Comunidad Valenciana, es privilegiado si tenemos en cuenta la variedad de todas y cada una de sus poblaciones y de la posibilidad de poder contar con el Mar Mediterráneo.

Asimismo, las personas que visitan la Costa Blanca, ya sean provenientes desde España o desde fuera de sus fronteras, quieren tener una oferta de ocio tanto diurna como nocturna. De ahí la importancia de poder contar equipo especializados en el entretenimiento infantil, en la organización de eventos culturas e incluso eventos musicales.

Por último, pero no por ello menos importante, hay que hablar de la gastronomía. Un turismo gastronómico que está en pleno auge y que anima a los turistas a probar y a degustar los manjares de una dieta, la mediterránea, que es considerada un absoluto privilegio en todo el planeta.

Un turismo que si llega en la nueva normalidad, se puede considerar como nuevo turismo. Una forma de verlo que no solo tiene que ver con la seguridad, la cual en los tiempos que corren tiene que darse por hecha. Un turismo por el que ya están trabajando todas las empresas y para el que, por supuesto, ya se están reservando grandes partidas de dinero. En realidad no puede ser de otra manera. Si se quiere volver de esta crisis sanitaria de la mejor manera posible, hay que ser conscientes de que solo se va a poder hacer acompañados de una gran cantidad de recursos de todo tipo.