Un Airbnb para mayores de 50 años

Pagando una membresía, en este club de viajes sociales los miembros ofrecen sus habitaciones libres para hospedar a otros adultos mayores de 50 años. De esta forma generan ingresos extras, conocen gente nueva y, al mismo tiempo, tienen la posibilidad de recorrer mundo de una forma enriquecedora.

“Al combinar de manera creativa aspectos de una web de alojamiento de viajes, como por ejemplo Airbnb, y una web de amigos en línea, no solo ofrecemos destinos donde pasar unas vacaciones, sino que facilitamos la afinidad entre huéspedes y anfitriones”, ha destacado su fundador, Peter Mangan

La plataforma social de viajes aspira a convertirse en una “solución para combatir la soledad, que la pandemia no ha hecho más que acrecentar”, al tiempo que “promueve un envejecimiento activo, saludable y conectado”.

Una vez que el ritmo de vacunación se haya alineado en todo el mundo y se alcance la llamada inmunidad de grupo, con un 70% de población mundial inmunizada, se irá reactivando la industria de los viajes.

En ese contexto, cree Mangan, “las personas mayores necesitarán toda la ayuda que puedan para movilizarse y reconectar con el mundo que los rodea y, lo que es más importante, entre ellos”, agregando que “el Freebird Club puede ser transformador porque ofrecemos vínculos sociales personalizados y un viaje Freebird a la casa de otro miembro conlleva un riesgo mucho menor, simplemente porque el contacto puede limitarse a una o dos personas”.

La iniciativa cuenta con 4.600 miembros y el objetivo a tres años es superar los 500.000 en todo el mundo y de esa forma “convertirnos en el líder mundial de viajes sociales para el mercado de más de 50 años. Para lograrlo buscamos colaborar con socios estratégicos, en particular con organizaciones involucradas en el envejecimiento o el ‘agetech’, así como con el sector de los viajes y el turismo, además de inversores adecuados”.

Este proyecto es uno de los semifinalistas europeos de los Premios Innovación de la Fundación MAPFRE e IE University. El próximo 17 de marzo un jurado elegirá a tres finalistas europeos y el ganador se conocerá en mayo.