Iberia no descarta adoptar medidas de reducción de plantilla

Publicada 24/09/01
Iberia no descarta adoptar medidas de reducción de plantilla
Iberia no descarta aplicar una reducción de plantilla, "de forma temporal o definitiva", a la vista de la incertidumbre que atraviesa el sector tras los atentados terroristas del pasado día 11 con aviones secuestrados por pilotos suicidas contra objetivos políticos y económicos estratégicos, según una carta remitida por el presidente de Iberia, Xabier de Irala, a los empleados de la aerolínea.
Iberia no descarta aplicar una reducción de plantilla, "de forma temporal o definitiva", a la vista de la incertidumbre que atraviesa el sector tras los atentados terroristas del pasado día 11 con aviones secuestrados por pilotos suicidas contra objetivos políticos y económicos estratégicos, según una carta remitida por el presidente de Iberia, Xabier de Irala, a los empleados de la aerolínea. "No queremos ocultar a nuestros trabajadores que, aunque aún no hay datos reales para decidirlas, no está descartado que nos veamos obligados a adoptar medidas de reducción de personal, temporales o definitivos", indica Irala en la carta. En la misiva, De Irala afirma que la situación aconseja elaborar un nuevo plan de reducción de capacidad y costes, que se va desarrollando "a medida que vamos conociendo los parámetros de la nueva situación. Estas medidas, según aclara el presidente de Iberia, incluyen la revisión de toda la programación de la compañía de bandera, "con la idea de imponer una reducción de destinos selectiva y orientada a eliminar rutas aún deficitarias". Según de Irala, la situación de crsis para el sector es indudable: "Hay -y va a continuar- una clara caída de la demanda. Se ha producido ya -y también va a continuar- un claro incremento de nuestros costes, especialmente en lo que respecta a incremento de medidas de seguridad, combustible y seguros. Las consecuencias de esta crisis en todas las compañías hace prever un endurecimiento de la competencia que en otros periódos resultó en una guerra de tarifas a la baja que provocó enormes pérdidas en todas las compañías. De Irala da cuenta también de los resultados obtenidos en los ocho primeros meses, que ascendieron a 19.200 millones de pesetas, superando las previsiones iniciales -aunque no ofrece datos comparativos respecto al mismo periodo del año anterior- mientras que los ingresos aumentaron un 11 por ciento. En este sentido, destaca que estos beneficios se han obtenido "a pesar de haberse frenado el crecimiento de la demanda, de los incrementos de los costes de combustible y del personal, la renovación de nuestra flota y las tasas que pagamos y de los conflictos laborales". Asimismo, advierte de que las perspectivas de beneficio para el cierre del ejercicio se han debilitado por la crisis derivada del ataque terrorista contra las torres gemelas de Nueva York.
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