La justicia investiga a Aerolíneas Argentinas por presuntas irregularidades en un contrato con una firma brasileña
Publicada 08/03/10
La justicia argentina entró en las oficinas de Aerolíneas Argentinas entre las acciones que efectúa para investigar si hubo irregularidades en la contratación de una firma brasileña para reparar un avión de la compañía expropiada en diciembre de 2008 al grupo español Marsans, según han informado fuentes judiciales.
Durante el registro, ordenado esta semana por el magistrado federal Julián Ercolini, los peritos obtuvieron una copia del contrato celebrado entre Aerolíneas y la empresa TAP M&E, encargada de reparar la aeronave en Río de Janeiro.
La investigación se inició a raíz de una denuncia del abogado Ricardo Monner Sans que sostiene que la compañía no cuenta con las habilitaciones técnicas requeridas, que las condiciones para la reparación son mejores en Argentina y que la contratación se hizo sin licitación previa.
La compañía argentina, controlada por el Estado, asegura que la contratación se hizo como resultado de una licitación en la que la firma brasileña presentó la oferta más económica, de 648.000 dólares (476.000 euros). Sin embargo, la denuncia de Monner Sans incorpora información aportada por la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), el sindicato que reúne a personal de mantenimiento de los aviones.
El Parlamento argentino aprobó en diciembre de 2008 una ley que autorizó al Estado a nacionalizar a Aerolíneas, propiedad del grupo español Marsans en un 94,41% del accionariado, apelando a la mala situación de la compañía, prácticamente en quiebra, poniendo en peligro una empresa estratégica para Argentina.
El déficit se dispara
Sin embargo, hace menos de dos semanas, según el reporte del ejercicvio fiscal de 2009, año en el que ha sido gestionada por manos argentinas, el déficit de la aerolínea se disparó hasta los 2.300 millones de dólares (unos 1.695,8 millones de euros) frente a los 1.062 millones de dólares (783,3 millones de euros) que contabilizó en números rojos en 2008, según datos del Ministerio de Hacienda argentino, recogidos por la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP).
Después de un año bajo control del Estado, la aerolínea sigue sin publicar sus resultados empresariales, de modo que resulta difícil desglosar la cifra del déficit para determinar qué partidas se destinan al gasto operativo, inversiones, operaciones de mantenimiento y reparaciones o a reducir la deuda de Aerolíneas, que rondaba los 900 millones de dólares (663 millones de euros) antes de su adquisición por el Estado, según informó el diario Clarín.
HOSTELTUR (transportes@hosteltur.com)
La investigación se inició a raíz de una denuncia del abogado Ricardo Monner Sans que sostiene que la compañía no cuenta con las habilitaciones técnicas requeridas, que las condiciones para la reparación son mejores en Argentina y que la contratación se hizo sin licitación previa.
La compañía argentina, controlada por el Estado, asegura que la contratación se hizo como resultado de una licitación en la que la firma brasileña presentó la oferta más económica, de 648.000 dólares (476.000 euros). Sin embargo, la denuncia de Monner Sans incorpora información aportada por la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), el sindicato que reúne a personal de mantenimiento de los aviones.
El Parlamento argentino aprobó en diciembre de 2008 una ley que autorizó al Estado a nacionalizar a Aerolíneas, propiedad del grupo español Marsans en un 94,41% del accionariado, apelando a la mala situación de la compañía, prácticamente en quiebra, poniendo en peligro una empresa estratégica para Argentina.
El déficit se dispara
Sin embargo, hace menos de dos semanas, según el reporte del ejercicvio fiscal de 2009, año en el que ha sido gestionada por manos argentinas, el déficit de la aerolínea se disparó hasta los 2.300 millones de dólares (unos 1.695,8 millones de euros) frente a los 1.062 millones de dólares (783,3 millones de euros) que contabilizó en números rojos en 2008, según datos del Ministerio de Hacienda argentino, recogidos por la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP).
Después de un año bajo control del Estado, la aerolínea sigue sin publicar sus resultados empresariales, de modo que resulta difícil desglosar la cifra del déficit para determinar qué partidas se destinan al gasto operativo, inversiones, operaciones de mantenimiento y reparaciones o a reducir la deuda de Aerolíneas, que rondaba los 900 millones de dólares (663 millones de euros) antes de su adquisición por el Estado, según informó el diario Clarín.
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