El consejero delegado de BAA renuncia a su bono anual por el caos en Heathrow

Publicada 23/12/10
El consejero delegado de BAA renuncia a su bono anual por el caos en Heathrow
El consejero delegado del gestor aeroportuario BAA, Colin Matthews, ha renunciado a su bono de este año luego del caos registrado en los últimos días en el aeropuerto londinense de Heathrow a causa de la fuerte nevada del pasado sábado.
"He decidido renunciar a mi bono del año en curso", afirmó Matthews, al manifestar que su objetivo principal ahora es lograr recuperar la normalidad en Heathrow, el principal aeropuerto de Reino Unido y primero de Europa por tráfico y en el que, por quinto día consecutivo, miles de viajeros en vísperas de Navidad se quedan sin tomar su avión.

El pasado martes en la tarde, el gestor aeroportuario consiguió reabrir la segunda pista del aeropuerto que, no obstante, aún funciona en un 60% de su capacidad con previsiones de volver a la normalidad la semana que viene.

BAA no quiso informar de la cuantía del bono que tenía previsto recibir este año Matthews, que en 2009 ganó 994.000 libras (1,16 millones de euros o 1,52 millones de dólares) entre salario y bonos, sin tener en cuenta el incremento patrimonial por acciones.

El gestor aeroportuario británico, propiedad del grupo español Ferrovial, ha recibido numerosas críticas en los últimos días por la incapacidad de limpiar con celeridad las pistas y las zonas de rodadura del aeropuerto.

No obstante, los aeropuertos vuelven poco a poco a la normalidad tras el caos de los últimos días. Heathrow y Gatwick están volviendo a operar servicios normales. Sin embargo, aún se esperan retrasos y cancelaciones, debido a que, con tantas anulaciones en diversos aeropuertos europeos, muchas aeronaves no están en el lugar que deben estar.

El pasado sábado, Heathrow se vio obligado a cerrar por completo y funcionó bajo mínimos durante los tres días posteriores.

Investigación

El caos ha sido de tal magnitud que el Gobierno anunció que habrá una investigación una vez que se vuelva a la normalidad.

El primer ministro, David Cameron, expresó el martes su "frustración en nombre de todas las personas afectadas por la excesiva tardanza para solucionar el problema".

Cameron dijo que "5 pulgadas (12,7 centímetros) de nieve en una hora es algo excepcional en el sur de Inglaterra" y recordó que el Reino Unido está sufriendo "el diciembre más frío en un siglo".

El consejero delegado de BAA, Colin Matthews, defendió la respuesta que ha dado la empresa a la nevada y también pidió tiempo para determinar si se pudo actuar mejor, una vez que se logre que todos los pasajeros aún retenidos puedan llegar a sus destinos.

"Lo estábamos haciendo extremadamente bien este invierno, hasta que llegó la nieve a mediodía del sábado, en una nevada que yo no he visto en Heathrow en mi vida", afirmó Matthews, que reconoció, no obstante, que las tareas de limpieza se prolongaron más de lo esperado.

Caos en el transporte

La nieve ha causado en el Reino Unido un auténtico caos en el transporte, incluidos los trenes y las carreteras, lo que ha creado problemas para miles de personas que por estas fechas viajan para visitar a sus familias.

En algunas zonas de Inglaterra los servicios ferroviarios siguen sufriendo retrasos y algunas cancelaciones a causa de la nieve.

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