El turismo idiomático y el cambio de modelo turístico
11 marzo, 2024 (09:10:01)Todavía se sigue oyendo con insistencia un viejo lugar común: hay que cambiar el modelo de nuestro turismo. Quien lo formula parece desconocer que el modelo turístico está en continua evolución. Podrá discutirse el ritmo, muchas veces por falta de asistencia de las Administraciones Públicas que provocan la pérdida de oportunidades. como es el caso actual de la negativa de un PERTE específico para el sector turístico, pero no que el cambio se esté produciendo.
Un ejemplo claro es el turismo idiomático o sea la enseñanza del español en España a estudiantes extranjeros. El pasado 22 de febrero la Federación Española de Escuelas de Español como Lengua Extranjera de (FEDELE), que agrupa a 103 centros, presentó su Informe anual sobre la situación de este subsector de nuestro turismo. Lo hizo, como en años anteriores, en la sede del ICEX, con la participación de TURESPAÑA, del Instituto Cervantes y del Ministerio de Asuntos Exteriores.
HOSTELTUR ya se ha hecho eco de las principales magnitudes ofrecidas en este Informe anual de FEDELE: crecimiento de un 29,43% de los estudiantes respecto a 2022, alcanzando la cifra de 133.452, muy cerca de la lograda en 2019, previo a la pandemia, y salvando las dificultades derivadas de la obtención de visados, la lenta recuperación del mercado chino y el hundimiento de los emisores ruso y ucraniano. Por ello este artículo se va a centrar no en el contenido del Informe sino en formular una serie de consideraciones de lo que representa el subsector de la enseñanza del español para extranjeros para el turismo español y las razones de su éxito.
El turismo idiomático es, en primer lugar y como se ha indicado anteriormente, un ejemplo del cambio de modelo turístico, basado en la diversificación del producto de nuestra oferta turística y en la desconcentración geográfica con presencia de los centros de enseñanza no sólo en las costas sino en el interior peninsular o incluso en lugares, como Barcelona, dónde podría pensarse que la enseñanza de la lengua española pudiera encontrar dificultades.
Pero el turismo idiomático no agota su potencial en este aspecto de diversificación de producto y de desconcentración geográfica. Es también un modelo de cooperación entre el sector privado y las Administraciones Públicas. Cada parte desempeña sus respectivos papeles. La iniciativa privada creando el producto y el sector público actuando como facilitador y promotor.
FEDELE es, también, un caso en cierto modo excepcional en el panorama empresarial turístico español, ya que constituye un éxito del movimiento asociativo de la oferta que le ha permitido dar pasos decisivos en la cualificación del producto, (las escuelas afiliadas han de estar acreditadas por el Instituto Cervantes mediante un procedimiento riguroso que se renueva cada dos años), que garantiza el nivel de enseñanza para sus alumnos. Los tiempos iniciales del movimiento asociativo no fueron fáciles y requirió una visión de futuro y un esfuerzo mantenido que fue progresivamente cuajando gracias al impulso de los pioneros y de los sucesivos equipos directivos que fueron tomando el relevo en la gestión de la Federación. Este impulso asociativo se refleja también en la decisión de FEDELE de incorporarse como miembro de la Mesa del Turismo de España.
Una manifestación de la madurez alcanzada por FEDELE es el Informe anual que proporciona datos decisivos sobre la oferta y la demanda que sirve de base para definir la estrategia de promoción y marketing en los mercados emisores. La elaboración de este Informe es una tarea compleja dada la diversidad de los centros, su diferente tamaño y la pluralidad de los cursos que ofrecen. A pesar de ello, cada edición anual supone un paso adelante en cuanto al volumen y el rigor de la información ofrecida sobre la realidad del sector.
El Informe, asimismo, respalda la capacidad de interlocución de la Federación en su relación de cooperación con las instituciones de las Administraciones Públicas. Y es este último aspecto de confluencia entre un cuajado movimiento asociativo del sector privado y de un consciente reconocimiento por las instituciones públicas de esta realidad y de la importancia que tiene la enseñanza del español a extranjeros tanto en su vertiente cultural como turística, el que merece ser destacado como contraste con otros subsectores turísticos, que muchas veces sólo encuentran dificultades en su relación con los poderes públicos. Y estas dificultades no solamente se derivan de la crónica minusvaloración, en incluso el desdén, que el turismo padece desde algunos departamentos del Gobierno nacional y desde algunos regionales, sino también de problemas cotidianos como la lentitud burocrática en la obtención de licencias, la creciente regulación, como la disparatada propuesta de limitar por ley la hora de apertura de los establecimientos hosteleros, y la asfixiante fiscalidad con propuestas como la de la implantación de una tasa turística de ámbito nacional.
En el caso del turismo idiomático puede verse que diferentes organismo de las Administraciones Públicas que antes de han enumerado, prestan su apoyo al sector privado, cada uno en el marco de su esfera competencial. Es indudable que hay un gran margen de mejora (visados de los estudiantes, labor promocional y de marketing) pero ya existe una base de partida sólida para seguir mejorando esa colaboración para desarrollar una actividad que tan importante es para el éxito de la difusión de la cultura española y para atraer visitantes a nuestro país, que luego se convierten en los mejores embajadores de los atractivos de España.
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta opinión no tiene comentarios.