Javier Gándara, presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA)

Las aerolíneas ofrecen este verano en España el 99,6% de las plazas de 2019

Denunció que el caos en Madrid-Barajas en los puntos de control provocó que más de 3.000 personas perdieran su vuelo o conexión

Publicada 20/04/22 -Actualizada 15/05/22 02:03h
Las aerolíneas ofrecen este verano en España el 99,6% de las plazas de 2019

La programación prevista para el verano 2022 por las aerolíneas alcanza cifras muy cercanas a la capacidad aérea ofrecida en el período equivalente previo a la pandemia de COVID-19, con 212 millones de asientos, apenas un 0,4% inferior a los niveles 2019; según ha anunciado este miércoles Javier Gándara, presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), al avanzar las previsiones para esta temporada estival. Asimismo, ha reiterado la necesidad de reforzar el número de agentes policiales en los controles fronterizos. Las largas colas en estos puntos provocaron en Semana Santa que más de 3.000 personas perdieran su vuelo o conexión solo en el Aeropuerto de Madrid- Barajas, con el deterioro dela imagen internacional del país.

No obstante, el presidente de ALA, Javier Gándara, se ha mostrado cauteloso frente a estos datos, ya que están condicionados por la evolución de la pandemia y de la guerra en Ucrania, que inicialmente frenó la actividad, si bien, de momento no ha tenido un impacto directo significativo, aunque sí indirecto, sobre el precio del combustible.

Entre otros datos, Gándara ha asegurado que, en el invierno 21/22, ha sido operado un 82% de los vuelos frente al periodo equivalente prepandemia. En cuanto al número de pasajeros, la recuperación fue inferior: el 72% de los que volaron el invierno 2019 lo hicieron este, con una clara tendencia ascendente, lo que significa que las aerolíneas comienzan a recuperar la ocupación de sus vuelos.

Como principales retos para la industria aérea este verano, Gándara ha destacado el alto precio del queroseno, que se ha duplicado frente al nivel de hace un año, lo que puede retrasar la recuperación en función de cuánto se mantenga el alza en el tiempo.

Reclamos de la industria

Gándara, en nombre de las aerolíneas asociadas a ALA, primera organización del sector en España, cuyos miembros concentra en conjunto el 85% del tráfico aéreo, ha reclamado una homogeneización de los requisitos sanitarios de entrada desde terceros países con una situación epidemiológica similar a la de la UE y el refuerzo de las dotaciones policiales de control de pasaportes en los aeropuertos con más tráfico internacional para contribuir a acelerar este verano la recuperación del sector, que no se espera hasta al menos el año 2023.

En este sentido, ha defendido que los miembros de la Unión Europea, y en particular España, acepten las pruebas diagnósticas para el ingreso desde terceros países, del mismo modo que lo hacen con los certificados de vacunación y de recuperación.

“Hay que acabar con esta maraña de disparidades que dificultan el viaje y disuaden al pasajero de venir. Deben darse facilidades, y si España tarda en dar este paso, corre el riesgo de perder tráfico de turistas que optarán por países vecinos, como ocurre en Francia, donde las pruebas diagnósticas tienen la misma validez que la vacunación o el certificado de recuperación para los residentes en una mayoría de terceros países”, ha recalcado el máximo representante de ALA.

En cuanto al refuerzo de efectivos policiales en los controles de pasaportes de los aeropuertos, ha reiterado la petición, en especial, para los aeropuertos con gran tráfico internacional, ya que la congestión se traduce en un perjuicio para los pasajeros, tanto nacionales como internacionales, en forma de retrasos o pérdida de vuelos o conexiones en el país.

Solamente esta Semana Santa, más de 3.000 personas perdieron su conexión solo en el Aeropuerto de Madrid- Barajas, a causa de las largas esperas producidas en los filtros fronterizos. Este problema afecta directamente a los pasajeros, pero además supone una dificultad añadida a la ya compleja operativa de las compañías aéreas, y repercute negativamente a la imagen internacional de España.

Reparación del agravio

ALA ha reiterado al Gobierno su petición de que exima a las compañías aéreas de los costes incurridos por Aena por las medidas sanitarias implementadas en los aeropuertos frente al COVID-19, que hasta septiembre de 2021 ascendieron a 150 millones de euros, exigiendo que sea el Estado el que asuma la totalidad de estos costes, para favorecer la recuperación del sector aéreo y del turismo.

ALA ha pedido al Ejecutivo que repare así el agravio ocasionado al sector aéreo, al ser el único modo de transporte excluido del Plan de Choque de Respuesta a la guerra de Ucrania, y que no deje pasar la oportunidad de incluir esta propuesta en el Real Decreto-ley 6/2022, de 29 de marzo, que regula este Plan anticrisis, en caso de que se tramite como proyecto de Ley tras su convalidación por el Congreso de los Diputados

En este punto, ha recordado que las aerolíneas también están soportando el alza en los precios del combustible, además de una subida desbocada del IPC de hasta el 9,8% en marzo, su tasa más alta en 37 años.

Congestión del espacio aéreo

Por otra parte, con la reactivación de las operativas y las compañías incrementando capacidad para este verano, ALA ha advertido nuevamente de los problemas de congestión en el espacio aéreo en Europa, una situación que se agravará en los próximos meses en Francia, debido a la reducción de actividad en el centro de control de Reims hasta finales de agosto por la implementación de un nuevo sistema de navegación aérea, lo que ejercerá presión en la capacidad del centro de control de Marsella, determinante en la gestión del tráfico aéreo de España desde y hacia Europa, y acentuará la acusada saturación que arrastran ambos centros.

Gándara ha afirmado que “esta situación provoca alteraciones en las programaciones de las aerolíneas y para los pasajeros, además de traducirse en más emisiones de CO2, y pone de manifiesto el negativo impacto de las huelgas en el control de aéreo que se vienen sucediendo, como las del centro de control de París o de Milán, generando preocupantes demoras e inconvenientes, especialmente en el momento actual, si bien ALA recalca el absoluto respeto al derecho a la huelga, pero puntualiza la necesidad de garantizarse también el derecho a la libertad de movimientos de los ciudadanos”.

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