Thomas Cook vende doce Boeing 757-200 por la escasa demanda

El grupo turístico Thomas Cook AG ha vendido doce aviones del tipo Boeing 757-200 para reducir sus capacidades en el mercado vacacional por la escasa demanda en Alemania. El grupo, que ha cerrado el año pasado con resultados poco satisfactorios, lo que dio pie a cambios en cúpula directiva, se espera ?efectos económicamente positivos" de la venta de los aviones. Como señaló un portavoz de Thomas Cook en declaraciones a HOSTELTUR, desde el año pasado ya estaba programada liquidar 13 aviones de la flota de Thomas Cook Airlines ?powered by Condor". Ahora, se ha hecho efectiva la venta de doce aparatos ?el décimotercero está en régimen de leasing- a la sociedad de financiación Center-Capital de Moskú (Rusia). Esta medida se debe a la bajada en la demanda de vuelos vacacionales en Alemania, y de hecho, las capacidades de estos aparatos ya no estban en la planificación para el verano 2004. Aunque el portavoz de Thomas Cook no pudo precisar si ello conlleva reducciones de capacidades hacia destinos españoles, el ahora ex presidente de Thomas Cook, Stefan Pichler, señaló en una entrevista concedida a HOSTELTUR el pasado mes de octubre que la reducción de capacidades ?seguramente, en los grandes destinos no tendrá efecto, al revés, incluso podremos crecer un poco más. Esta medida afectará más a destinos vacacionales a los que a lo mejor sólo volamos una o dos veces a la semana". La junta de administración de Thomas Cook aprobó la venta de los doce aparatos en diciembre, como parte de la estrategia de reducir capacidades en vuelos de corta y media distancia. La sociedad rusa Center-Capital se hará con los aviones de forma sucesiva hasta el próximo mes de octubre. Según el portavoz de la empresa, ocho de los aparatos ya no volaban para Thomas Cook Airlines, mientras que los otros cuatro se eliminarán de la flota hasta octubre. Cuando haya terminado este proceso, Thomas Cook contará con 35 aviones en el mercado alemán, a parte de las flotas que mantiene en el Reino Unido y en Bélgica. A corto plazo, la reducción de las capacidades ya ha tenido efectos económicamente positivos. Por otra parte, la venta de los aviones conlleva reducciones de personal. Según el grupo, se está negociando con el comité de empresa para conseguir una reducción de personal socialmente sostenible a través de fluctuaciones naturales y "medidas voluntarias". Respecto al destino de los doce Boeing 757-200, no se sabe cómo serán utilizados, aunque se rumorea que serán operados por una compañía aérea rusa. De hecho, el mercado ruso está cobrando cada vez más fuerza como mercado emisor en Europa. (CH. M./ HOSTELTUR/ charlotte@hosteltur.com)