El espacio de restauración y ocio ROTO reabrió sus puertas en Ibiza

ROTO es un espacio de restauración y ocio ubicado en el puerto deportivo Marina Ibiza construido sobre una plataforma que sobrevuela el Mediterráneo por encima de un rompeolas y con unas vistas de impacto a la ciudad antigua de Dalt Vila. Ayer, 15 de marzo, anunció que abría de nuevo sus puertas, después de que el Govern de les Illes Balears autorizase que la restauración de la mayor de las Pitiusas volviera a operar.

El restaurante ROTO es, por méritos propios, uno de los espacios de ocio más populares de Ibiza gracias a un concepto actual que se sustenta en un excelente ambiente de buena gente -tanto de locales y como de foráneos- y una oferta culinaria -rica, casera y a precios razonables-, donde el cuidado de la salud y la seguridad de sus invitados y empleados es prioritario.

Una copa antes de la comida

Disfrutar de una copa en ROTO a modo de aperitivo es un excelente entretenimiento culinario y es, según sus directivos, la mejor excusa para quedar, juntarnos, reír, charlar y volver a disfrutar de la felicidad y de la libertad.

Esa es la esencia que quiere compartir ROTO con todos sus amigos, poder disfrutar de la felicidad con las personas que más queremos y arrancar el día con una alternativa sofisticada y diferente, un combinado con su mixer, hielo y su rodaja de limón para saborearlo con tranquilidad, en uno de los mejores entornos de Ibiza.

Una visita a Ibiza pasa necesariamente por ROTO, fiel en su nueva carta a todos sus principios, ofrece una restauración en un ambiente cuidado y con una atmósfera desenfadada, trabajando desde la seguridad que dan unas materias primas exquisitas, un entorno único para disfrutar mientras se mira y somos observados, la tradición de una cocina que nos acerca a los sabores más auténticos de la cocina mediterránea y el acompañamiento de la buena música de hoy y de siempre, como forma de expresión.

Para Miguel Sancho, socio fundador de ROTO, "nuestra preocupación ha sido máxima en la preparación de un espacio seguro para nuestros clientes y empleados. Con la reducción de aforos al 50% ampliamos el distanciamiento entre comensales y entre mesas. La cámara térmica de medición de temperatura corporal en el acceso, la desinfección de mesas y sillas tras cada uso, las cartas virtuales con acceso mediante código QR y todo en un espacio de terraza que nos permite que la actividad se desarrolle al aire libre y con la máxima seguridad. Además todos los que componemos el universo ROTO, socios, cuadros directivos, empleados y colaboradores, nos realizamos test periódicos y mantenemos el uso permanente de mascarillas y geles desinfectantes. Finalmente priorizamos los materiales reciclables de un solo uso, evitando transmisiones por contacto, y trabajamos duro en la gestión de las reservas para evitar aglomeraciones en el acceso al establecimiento". Con todo ello en ROTO pudieron reabrir este lunes con todas las garantías para disfrutar de la libertad de Ibiza.

UN MENÚ MUY MEDITERRÁNEO, ELABORADO CON LA MEJOR MATERIA PRIMA

Centrados en la calidad del producto, sus platos concentran todo el sabor del Mediterráneo, con sus ya famosos pescados como el Rodaballo al pil-pil con ajada de kimchi, acompañado de patata asada machacada, complementados con una amplia variedad de ofertas como el pollo payés cocinado a baja temperatura con su guarnición de patatas, chalotas, ajos y puerros asados, o la mítica hamburguesa de ternera aliñada con perejil, tomillo y ajo acompañada de queso cheddar y pepinillo encurtido, son solo algunas de las elaboraciones artesanales que nos transmiten todo el sabor de la tradición, con recetas que buscan siempre resaltar el sabor original de la inmejorable materia prima que nunca falta.

Si hay un lugar, por encima de todo, mágico en España, ese es Ibiza. Rodeada en su totalidad por el agua más cristalina del mediterráneo desprende una calma a la que muy pocos pueden resistirse y ROTO se encuentra en la proa de la isla, ubicado en el puerto deportivo Marina Ibiza, sobre una espectacular plataforma que parte de uno de sus pantalanes, sobrevolando el mar para ofrecer unas vistas inmejorables a los amantes del mar, aquellos que cada día han de sentir el viento de levante, aunque sigan pisando tierra firme.