El Círculo Internacional de Directores de Hotel cumple su primer año

Vicente Romero atribuye “este éxito a que nos dedicamos exclusivamente a los directores y directivos de hostelería, sin tener presente en que ciudad o país se encuentren; y nos centramos en transmitir la importancia del factor humano en hotelería y valores a nuestros jóvenes, clave para esta profesión y para la sociedad que servimos. Para nosotros el futuro no es disponer de tecnologías, es saber utilizarlas”.

A ello se suma “una bolsa de empleo única en el mundo gracias a que tenemos contacto directo con los responsables de Recursos Humanos de todas las cadenas a nivel internacional, por lo que recibimos todas los días sus ofertas, que publicamos tras seleccionar las que pueden ser de interés para nuestros directivos del CIDH”.

En la web, según informa Romero, “tenemos publicado nuestro código de conducta donde están claros los objetivos con los que nació el CIDH. Nos hemos adaptado a los tiempos en que vivimos y a las necesidades de nuestros colegas, lo que quiere decir que nuestros asociados pagan cuota si requieren algún servicio personalizado de la Asociación”.

Vicente Romero es el presidente y fundador del Círculo Internacional de Directores de Hotel (CIDH).

Del mismo modo, añade, que “ayudamos a nuestros directivos con la bolsa de empleo, también lo hacemos buscando proveedores que aporten un valor al profesional y a su empresa”. Ejemplo de ello es el acuerdo firmado con Iberia con carácter internacional, que ofrece a sus miembros “unas condiciones de las que se pueden beneficiar en sus desplazamientos”. En este sentido el directivo ha destacado de la aerolínea que “desde el primer momento apostó por ayudar a CIDH, por ser el colectivo de directivos que gestionan la primera industria de nuestro país”.

La gestión del cambio, como reconoce el presidente de la Asociación, “exigía adaptarnos a las capacidades tecnológicas impulsando las innovaciones que nos llegan en beneficio de todos, siguiendo únicamente unas motivaciones colectivas”. De esta manera “hemos conseguido de lo imposible, lo posible: unir cada día más a nuestros colegas de profesión”.

Nuestra profesión, recuerda Romero, “es pionera en la globalización. Gracias a la profesionalidad, vocación y los valores personales, gozamos de un reconocimiento y reputación muy altos a nivel mundial”.