Tras la cuarentena impuesta por Londres

Contención de daños en Reino Unido: España intenta salvar el 70%

Siete de cada diez plazas aéreas para agosto y septiembre se concentran en Baleares, Canarias, Alicante y Málaga

Publicada 27/07/20 -Actualizada 20/08/20 02:01h
Contención de daños en Reino Unido: España intenta salvar el 70%

Contención de daños. Esta es la estrategia que intenta aplicar España una vez que el Reino Unido ha reinstaurado por sorpresa la cuarentena para todos los viajeros que aterricen en las islas británicas, con el fin de contener la propagación del COVID-19. Un dato es clave: el 70% de las plazas aéreas para los meses de agosto y septiembre se concentran en los aeropuertos de Baleares, Canarias, Alicante y Málaga.

Destinos de playa luchan por salvarse

Retener todo lo que se pueda de ese 70% será fundamental para salvar parcialmente el verano, al menos en buena parte de los destinos vacacionales.

De ahí las negociaciones que el gobierno español y varias comunidades autónomas han abierto con el ejecutivo británico para que la cuarentena no se aplique a determinados destinos donde la tasa de contagios es menor incluso que en el Reino Unido.

Corredores aéreos

Este lunes, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha asegurado que el Gobierno establecerá un diálogo con las comunidades que piden corredores aéreos turísticos seguros para ver cuál es su propuesta y trasladarla al Gobierno británico, siempre basada en datos y en la situación epidemiológica.

La ministra ha comparecido en Ibiza, junto a la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, y ha recordado que el Reino Unido "no recomienda viajar a la península, no así a las islas", aunque la cuarentena se ha extendido a todos los territorios.

Por ello, ha explicado que las conversaciones que se mantienen con las autoridades británicas se centran en quitar la cuarentena en Baleares y Canarias, "si es hoy, mejor que mañana", ha dicho.

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Las ciudades, muy tocadas

Otra cosa muy diferente es lo que pueda ocurrir en Madrid y Barcelona.

Y es que según apunta Carlos Cendra, director de marketing de la empresa Mabrian Technologies, la reacción de España frente a la cuarentena impuesta por el gobierno británico va encaminada a intentar salvar, vía negociaciones con Londres, los principales destinos vacacionales, "teniendo en cuenta que el 70% de las plazas aéreas para agosto y septiembre se concentra en Baleares, Canarias, Málaga y Alicante".

"Sin embargo, será muy complicado quitar de la cuarentena a los aeropuertos de Madrid y Barcelona", apunta Carlos Cendra.

"Los esfuerzos deberían centrarse en comunicar que la situación sanitaria en determinados destinos es incluso mejor que la del Reino Unido"

Por tanto, "los esfuerzos deberían centrarse en comunicar que la situación sanitaria en determinados destinos es incluso mejor que la del Reino Unido", añade este experto.

Sin embargo, convencer a las autoridades británicas para que excluyan determinados destinos de la cuarentena no va a ser fácil.

De hecho, comenta Carlos Cendra, "creo que no se ha hecho lo suficiente a la hora de controlar el origen de los pasajeros aéreos, tanto en vuelos nacionales como internacionales, tal como se viene reclamando desde Canarias y Baleares".

"Si se comenzaran a aplicar esos controles sanitarios y pruebas en origen a todos los pasajeros, el mensaje que se podría trasladar al exterior sería que nuestros destinos vacacionales incluso hacen filtros dentro del propio país", concluye el director de marketing de Mabrian.

Falta de reflejos

Este lunes, en declaraciones a la emisora SER, el presidente de la Mesa del Turismo, Joan Molas, ha declarado que el cerrojazo del Reino Unido podría haberse evitado.

"Es una situación preocupante, que se podía prever y se tenían que haber tomado muchas más medidas, de comunicación y de relación diplomática, sobre todo con Reino Unido", dice Molas. En su opinión, la situación ha pillado a la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, "con el pie cambiado".

Según ha añadido Molas, el sector turístico está perdiendo 5.000 millones de euros a la semana, desde el pasado mes de marzo.

Y si la situación no mejora, las pérdidas ascenderían hasta los 120.000 millones de euros al cierre del ejercicio.

La entrevista de Joan Molas en la cadena SER se puede escuchar aquí:

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