El consumidor percibe una inflación entre tres y 10 veces superior a la real

La gallina de los huevos de oro, ¿en peligro por inflación y precios altos?

eBooking alerta de que una subida excesiva de precios puede desviar la demanda a otros destinos

Publicada 18/05/23 -Actualizada 15/06/23 02:00h
La gallina de los huevos de oro, ¿en peligro por inflación y precios altos?

Nadie sabe cuánto va a durar el efecto botella de champán en la demanda, que mantiene unos niveles disparados de consumo a pesar de factores disuasorios como la elevada inflación, los tipos de interés y la subida de precios generalizada en el sector turístico. Hoteleros, como Ramón Aragonés, CEO de NH Hotel Group, reconocía en el Foro Hosteltur 2023 que “hay cosas que no cuadran”, según publicó HOSTELTUR noticias de turismo en NH prevé que los “márgenes favorables” sigan en 2023 y 2024. Meliá, por su parte, ha adelantado un año la recuperación de la normalidad gracias a ese efecto champán. Pero ya se elevan voces advirtiendo de los riesgos de acabar con la gallina de los huevos de oro.

Artículo exclusivo para suscriptores Premium

Forma parte de la comunidad de líderes de la transformación positiva de nuestro sector.
Elige el plan que mejor se adapta a ti, y accede a todo nuestro contenido, descárgate nuestras revistas y disfruta de descuentos y otras ventajas en los eventos organizados por Hosteltur.

60€ Anual (0,17€ al día) Hazte premium
8,99€ Mensual (0,30€ al día) Hazte premium

La percepción de la inflación y la consecuente pérdida de poder adquisitivo provocan los cambios en el comportamiento de compra de los consumidores, que se ve afectado tanto en frecuencia como en volumen de gasto en el primer trimestre del año. ¿Pero qué pasa si además, por quinto mes consecutivo, la inflación percibida por los consumidores sigue siendo 10 veces superior a la real en la industria del ocio y tres veces superior en restauración, como ha revelado consultora global de estrategia y marketing Simon-Kucher?

Lo cierto es que la inflación se ha ralentizado en el primer trimestre de 2023, situándose en un 5% en Estados Unidos, y en un 6,9% en Europa. En España, en marzo se quedó en el 3,3%, dos puntos y medio por debajo del índice de febrero y seis puntos y medio menos que un año antes.

Los hoteleros también han tenido que asumir subidas de costes de doble dígito, pero si presionan demasiado al alza los precios se pueden encontrar con que se acabe el efecto champán y se produzca una recesión en la demanda. Foto: Adobe Stock.

La mayor distorsión entre estos valores y la percepción del consumidor se produce, una vez más, en la industria del ocio, donde los encuestados perciben una inflación del 32% frente al 3% real, según el panel trimestral de Simon-Kucher de percepción de precios en los sectores de viajes, restauración y ocio.

A pesar de que en el último año el índice oficial de ocio se ha mantenido estable entre un 2% y un 4%, la percepción de la inflación por parte del consumidor ha sido exponencial, pasando de un 7% en el primer trimestre de 2022 a un 33% a finales de ese mismo año.

La principal razón de esta distorsión, como han apuntado desde la consultora, “se debe al efecto halo, que provoca que el consumidor perciba precios mayores a la realidad debido a la alta difusión en medios y a la validación social de una subida de precios generalizada”

No obstante, en Simon-Kucher han confirmado que “el sector del ocio no ha aprovechado la coyuntura para subir los precios debido al miedo a afectar a un tráfico ya dañado por el cambio en los hábitos de consumo. Por ello es necesario que trabaje en realizar subidas de precio sofisticadas, protegiendo los productos más visibles, y que refuerce la comunicación de promociones atractivas”.

Precisamente los restaurantes, según han indicado las mismas fuentes, “han subido los precios de manera poco sofisticada, lo que ha provocado una percepción negativa, afectando directamente al consumo”. Prueba de ello es que “el consumidor percibe de media una inflación de un 27%, tres veces superior al 8% del índice técnico”, y se han duplicado los encuestados que declaran que van a reducir su gasto, tanto en restaurantes como en servicios de comida a domicilio, y triplicado los que van a rebajar la frecuencia en contratar este último servicio.

Más noticias sobre subidas de precios y sus efectos, en:

- Viajar a Mallorca este verano le cuesta un 12% más a los alemanes

- La Economía habla: fortalezas y debilidades del turismo a medio plazo

- Steve Heapy: "No podemos recuperar lo de tres años en uno"

- Las escapadas para este puente de mayo serán un 25% más caras que en 2022

- Fuerzas disruptivas que pueden poner en peligro la recuperación turística

Los restaurantes, según han aconsejado desde la consultora, “se deberán enfrentar a una revisión de precios, sobre todo de aquellos productos con mayor visibilidad, para corroborar la efectividad de las últimas subidas e implementar los ajustes necesarios. Las promociones jugarán un papel muy importante en la activación y mantenimiento del tráfico, especialmente en el servicio a domicilio”.

En viajes, percepción más alineada con la realidad

Sin embargo, en el sector de viajes el consumidor percibe una inflación del 19%, frente al 17% del índice oficial en el primer trimestre, con una percepción así más alineada con la realidad. El sector, como han explicado desde Simon-Kucher, “está capitalizando la subida de demanda posCOVID y ha sabido aprovechar la ola de inflación para extraer al máximo la disposición de pago”.

A pesar de las excelentes previsiones a corto plazo, han advertido desde la consultora, “uno de cada cuatro encuestados manifiesta que reducirá a futuro el número de viajes, señal que debe alertar a la industria de posibles cambios en la demanda”

Para Miguel Afán, socio de Simon-Kucher experto en la vertical de Viajes, Restauración y Ocio, la causa de estos desajustes entre realidad y percepción reside en “la falta de sofisticación en la gestión de los precios”. Y ha incidido en que “la percepción es la realidad del consumidor, por lo que estimamos que esta distorsión traiga consecuencias negativas en el consumo este mismo año”.

“Las empresas del sector deberían revisar sus políticas de precio y promoción de forma más sofisticada para no dañar la imagen de precio de la marca y adaptar sus estrategias en función del segmento de cliente”, según han recomendado desde Simon-Kucher

¿Desvío de demanda?

Por su parte, desde eBooking han avisado de que “una subida excesiva y continuada de los precios de los alojamientos vacacionales puede desviar la demanda hacia otros destinos turísticos más económicos como Portugal o Grecia, perjudicando de forma importante en el medio plazo al turismo español”.

Los precios están tan disparados, como ha subrayado su director, Toni Raurich, “porque sigue habiendo demanda que lo soporte”. Y además siguen una tendencia alcista, ya que si para Semana Santa las reservas fueron un 22% más caras que un año antes, pasando de 127 euros de media por noche a 155, para el puente de mayo el incremento alcanzó un 25% al subir la tarifa por noche de 120 a 150 euros.

Cataluña ha sido la Comunidad donde más ha aumentado el precio del alojamiento en el puente de mayo, un 78,3%, pasando de 118,4 euros de media por noche en 2022 a los 211,1 de un año después

Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta

Inicia sesión
Comentarios 0

Esta noticia no tiene comentarios.