El Futuro de los nuevos destinos turísticos bajos en carbono
5 julio, 2017 (14:29:44)Ideas capturadas en la #EXPO2017 en Astana, durante el congreso de la OMT “El turismo y la energía del futuro: en busca de oportunidades de crecimiento con bajas emisiones de carbono”
No les voy hablar del cambio climático porque estoy convencido que todos están al tanto de las consecuencias del cambio global que nuestro entorno está padeciendo en los últimos miles de años, pero es recientemente cuando la valoración de las consecuencias se mide en cómo afecta al patrimonio humano, esencialmente las ciudades, explotaciones agrarias, etc. y específicamente a los destinos turísticos.
Es un hecho, que este cambio global climático, está modificando patterns ya conocidos, cuando se podía pronosticar un clima y relacionarlo con la ubicación geográfica (Se echan a bajo los refranes que tanto sirvieron), cosa cada vez más difícil, ya que la Europa más fría, se calienta como el sur y el sur como el desierto, lo que consecuentemente afecta al comportamiento de compra de la demanda turística, que si bien todavía no está alertada, cada vez mas romperá los estereotipos geográficos – climáticos.
Y obviamente estos cambios no solo afectan al clima sino a los microclimas, que han sido factores competitivos en muchas ocasiones. Pero mas allá, el tema de las lluvias torrenciales o borrascas continuas, o las largas sequias y los incendios, están y estarán condicionando muchos factores de atracción de diferentes destinos en el mundo .
Por otra parte, cabe señalar que no se sabe si estamos en una situación reversible o no, aunque pienso que no, sino que evolucionaremos hacia escenarios nuevos, diferentes que impactaran no solo en los destinos, sino más aun en el comportamiento y percepción de la demanda turística, al igual que en el resto de la sociedad.
Por ello, los destinos si pueden reaccionar e incluso anticiparse a nuevos escenarios más complejos, implementando estrategias ambientales y sociales, con mucho menor impacto ambiental en su entorno próximo y en el hinterland cercano.
Recientemente en el pasado evento celebrado en la #EXPO2017, en Astana. En el congreso de la OMT sobre El turismo y la energía del futuro: en busca de oportunidades de crecimiento con bajas emisiones de carbono, se menciono no solo el proyecto europeo de nearly zero hotels, sino también de propuestas de movilidad con emisiones bajas o de emisiones cero en carbono, que no son difíciles de implementar en muchos destinos, si tienen voluntad de hacerlo.
Ya existen algunos destinos donde se incentivan económica y fiscalmente así como facilitan infraestructuras adecuadas para la movilidad eléctrica (Tesla o Volvo) para vehículos, con puntos de recarga gratuitos, acceso prioritario, parking sin coste, etc. o bien el uso de otro tipo de combustibles, como el gas (Mucho menos contaminante, en especial de NO, oxido de nitrógeno) e incluso ya se experimentan nuevos prototipos con Hidrogeno, que no emite ningún componente toxico al ambiente y se fabrica a partir del agua, emitiendo vapor de agua.
En la isla de la Gomera (Canarias, España) se logro ya tener un destino con energías completamente renovables. Es cierto que las ayudas públicas han logrado esta posibilidad, pero no está lejos que el sector privado y más aun el mixto (PPP), diseñe políticas de gobernanza que logren este objetivo de desarrollar destinos con muy bajas emisiones de carbono.
También los trasportes aéreos, marítimos y terrestres contribuyen negativamente y están comenzando a aplicar medidas de eficiencia energética, con su consecuente reducción en emisiones, pero aquí es importante alarmar sobre la producción de los biocombustibles, que compiten peligrosamente con la agricultura proveedora de alimentos.
Pero permítanme, además, justificar otro porque igual o más importante que reducir o evitar emisiones a la atmosfera. Hablamos de la calidad ambiental, de la percepción positiva por parte de la demanda turística, que sin duda alguna, se beneficiaria de esta política, ya que su bienestar se verá incrementado de una forma muy notoria.
No solo se evitaría estar en entornos que cada vez puede ser mas tóxicos y afectan a la salud, sino que la percepción de calidad del aire, por ejemplo es algo perceptible de forma inmediata, así como los ruidos producidos por motores de combustión, e incluso el microclima que se puede crear en este tipo de entornos más limpios, de mayor calidad ambiental.
Es un reto alcanzable, aunque en diferentes velocidades, según la capacidad de actuación de los destinos y obvio de la voluntad política de los actores involucrados, tanto públicos como privados.
Aquí tendríamos que usar la fase famosa de Obama, del “Yes, we can”, porque es cierto y porque además hablamos de un impacto en mas de miles de millones de turistas en el mundo, tanto internacionales como nacionales.
Sin duda estos nuevos destinos bajos en carbono serian los centros de sensibilización ambiental para el resto de las ciudades.
Un cordial saludo,
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta opinión no tiene comentarios.