El Rey destaca la "nueva era" del transporte aéreo, "dependiente" de la cooperación y entendimiento internacionales

Su Majestad el Rey, Don Juan Carlos I, destacó ayer durante el discurso inaugural de la 57 Asamblea Anual de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), el inicio de "una nueva era" del transporte aéreo, "dependiente" de la cooperación y el entendimiento internacionales. "No hay industria en el mundo tan completamente dependiente de la comprensión, cooperación y entendimiento internacionales para su correcto funcionamiento", aseguró Don Juan Carlos. Asimismo, hizo hincapié en la "revolución" en la que el sector está inmerso, "que influirá en un nuevo planteamiento de las relaciones comerciales", así como su participación en el proceso de globalización, como demuestran "las grandes alianzas entre compañías aéreas". "El carácter plurinacional de estas alianzas es, en buena medida, responsable de esta nueva revolución, que conlleva la modificación de conceptos nacionales por otros multilaterales", indicó el monarca, quien añadió que "pocos" sectores "se han expandido tan rápidamente y han tenido que enfrentarse a la necesidad de realizar importantes cambios en las leyes, hábitos y modos de pensar", como el aéreo. Por otro lado, atribuyó los cambios en el sector aéreo, principalmente, a la aplicación de las nuevas tecnologías, que han conducido a un aumento de la demanda y de la calidad del servicio; y a la seguridad, "que sigue siendo la preocupación principal de las compañías aéreas, los fabricantes aeronáuticos y las autoridades competentes". En este sentido, destacó los avances en el diseño de aeronaves, más rápidas y con mayor capacidad, y el desarrollo de sistemas de navegación por satélite, que permiten rutas más directas "y por lugares más remotos". Por último, Su Majestad se refirió a la "disposición" de la industria y las autoridades para reducir los niveles de emisiones y contaminación acústica, "poniendo con ello de manifiesto su preocupación por el impacto medioambiental de su actividad, acorde con la sensibilidad que nuestra sociedad tiene hacia este tema". "Cada uno de estos avances impulsa una renovación presidida por los principios que desde siempre han guiado su trayectoria colectiva: iniciativa, calidad, servicio y experiencia", concluyó. Por su parte, el ministro español de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, declaró durante el acto inaugural de la Asamblea de IATA, que las medidas que se tomen en el sector aéreo en los próximos años serán "decisivas". Entre éstas mencionó las relacionadas con la liberalización del sector, los pactos multilaterales, la flexibilización de los acuerdos bilaterales y las relativas a la propiedad de las líneas aéreas. Para Álvarez-Cascos, estos factores serán la "base" del desarrollo de las nuevas estructuras empresariales, que permitirán hacer frente al aumento de la demanda del tráfico aéreo. Sobre este punto, el ministro afirmó que el Gobierno ha respondido a estos "retos" haciendo un "esfuerzo inversor" en aeropuertos y navegación aérea que asciende a 1,5 billones de pesetas (9.000 millones de euros) hasta 2007, con el que pretende dotar a las infraestructuras de "capacidad suficiente para facilitar el desarrollo sin restricciones del transporte aéreo". El presidente de la Asamblea de IATA y de Iberia, Xabier de Irala, declaró por su parte en su discurso inaugural que España es el "primer mercado europeo en volumen de pasajeros y el cuarto en todo el mundo", con 141 millones de viajeros transportados al año, aunque se espera que esta cifra ascienda a los 200 millones en 2005. En este sentido, De Irala destacó que España recibe anualmente 60 millones de visitantes extranjeros, de los que el 70 por ciento llegan por vía aérea, que han convertido al turismo en la primera industria del país. La inauguración de la Asamblea Anual de IATA contó, además, con la presencia de la comisaria de Transportes y vicepresidenta de la Comisión Europea, Loyola de Palacio, y el presidente de IATA, Pierre J. Jeanniot.