British Airways registra unas pérdidas de 262,3 millones de euros en el último trimestre de 2001

La compañía aérea British Airways (BA) ha registrado unas pérdidas, antes de impuestos, de 262,3 millones de euros (43.643 millones de pesetas) en el tercer trimestre de su ejercicio 2001/2002 (octubre-diciembre), frente a un beneficio de 106,56 millones de euros (17.729 millones de pesetas) registrado en el mismo periodo del ejercicio precedente, según informaron hoy fuentes de la aerolínea. Las pérdidas de explotación se situaron en torno a los 306,55 millones de pesetas (512.006 millones de pesetas) en el período entre octubre y diciembre de 2001, frente a un beneficio de 131,15 millones de euros (21.820 millones de pesetas) en el mismo período del ejercicio anterior. En los nueve primeros meses del ejercicio en curso, la compañía acumula unas pérdidas, antes de impuestos, de 188,52 millones de euros (31.367 millones de pesetas) frente a un beneficio de 352,45 millones de euros (58.643 millones de pesetas)en los nueve primeros meses del ejercicio anterior; y unas pérdidas de explotación de 106,56 millones de euros (17.729 millones de pesetas)frente a un beneficio de 722,94 millones de euros (120.287 millones de pesetas) en el mismo periodo del ejercicio anterior. El director general de la compañía, Rod Eddington, confirmó que se producirán despidos suplementarios además de los 7.000 anunciados anteriormente. Sin embargo, se ha negado a confirmar si esta cifra sería de un total de 10.000 despidos como ha aparecido en la prensa. British Airways, que emplea un total de 57.000 personas, se ha visto profundamente afectada por la ralentización de la economía y la caída de la frecuencia de los vuelos transatlánticos, que son su principal fuente de ingresos. Por otra parte, la compañía desvelará la próxima semana las conclusiones de su estudio estratégico 'Tamaño y Forma futuras' acerca de su futuro. "Hemos realizado esfuerzos reales en la gestión de nuestros costes, pero BA debe hacer frente todavía a numerosos desafíos, algunos de los cuales eran ya evidentes antes de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos", declaró Eddington. Por su parte, el presidente de la aerolínea británica, Colin Marshall, apuntó que "la debilidad económica en algunos de los mercados clave continuará, pero la inquietud y la incertidumbre iniciales motivadas por el 11 de septiembre han disminuido y observamos una mejora de la tendencia para nuestros resultados".