Tenerife acogió 104 producciones audiovisuales en 2017

Los 9,6 millones de euros que generaron las producciones audiovisuales favorecen a los sectores turístico y audiovisual, dado que esa cantidad se ha destinado a la contratación de equipos, talento local, transporte, alojamiento y manutención, entre otros conceptos.

Carlos Alonso ha destacado que el Cabildo de Tenerife lleva años apostando por este sector por su capacidad de generar empleo cualificado, una línea de trabajo que se enmarca dentro de la estrategia Tenerife 2030 que impulsa la corporación Iinsular.

El consejero insular de Turismo, Alberto Bernabé, ha anunciado que el consejo de administración de Turismo de Tenerife acordó en su última reunión solicitar al Cabildo que declare la industria audiovisual “como un sector estratégico par la isla".

Alberto Bernabé, consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife; Carlos Alonso, presidente de la corporación, y Ricardo Martínez, director de la TFC.

De acuerdo a las estadísticas de Tenerife Film Commission (TFC), el departamento de Turismo de Tenerife encargado de promocionar la isla como escenario para producciones cinematográficas, publicitarias y fotográficas, las sesiones de fotografía fueron las más numerosas, con un total de 40.

El director de la TFC, Ricardo Martínez, ha detallado que a continuación se situaron, por número, las de publicidad, con 23; los programas de televisión, con 18; y los largometrajes, con 10. Hubo también tres cortometrajes, tres documentales, dos videoclips y cuatro series de televisión.

En total, TFC atendió 250 solicitudes el año pasado, mientras que la suma de días de rodaje, grabaciones o sesiones de fotografía —según el tipo de producción— ascendió a 635.

La inversión de estas producciones por día en Tenerife oscila entre los 2.000 y los 15.000 euros de las sesiones de fotografía para catálogos o publicidad, respectivamente, a los 50.000 euros que puede dejar la grabación de un anuncio de televisión.

Si se trata de largometrajes, el importe se mueve entre los 20.000 y 35.000 euros de los europeos, para llegar hasta los 350.000 de las superproducciones o majors norteamericanas.