Easyjet y Ryanair no subirán los precios por el alza del combustible

Las aerolíneas de bajo coste que operan en España no se han sumado al aumento generalizado de las tarifas aéreas adoptado por la mayoría de las compañías tradicionales, por la subida del petróleo, cuyo precio por barril ronda los 40 dólares, han asegurado la irlandesa Ryanair y la británica easyJet. En cambio, han criticado esta medida, que, según la irlandesa, "deja en evidencia el bajo concepto que dichas compañías tienen de los consumidores españoles", en referencia a Spanair y Air Europa, que aumentaron sus tarifas entre un 3 y un 6 por ciento. Las líneas de bajo coste easyJet y Ryanair han garantizado, asimismo, que no impondrán a sus billetes un recargo por combustible, a pesar de que éste se ha convertido en remedio común de las compañías tradicionales, iniciado, entre otras, por American Airlines, British Airways y Quantas, que "como es habitual, hacen pagar más al consumidor". Según Ryanair, "no es justo que los pasajeros que ya han comprado su billete se vean obligados ahora a abonar cargos por la subida del petróleo", ya que -añade- "al fin y al cabo no ofrecen recompensas a sus pasajeros cuando el precio del combustible baja". Mientras que las aerolíneas de bajo coste se han comprometido al total mantenimiento de sus tarifas, aunque suba el precio del petróleo, no ocurre lo mismo con las compañías denominadas "de bajo precio", entre ellas la recién lanzada Air Madrid, que empieza a operar el próximo 31 de mayo. Fuentes de esta compañía, que ha nacido con el objetivo de ofrecer vuelos entre España y Latinoamérica a precios reducidos, casi en un 50 por ciento respecto a las líneas tradicionales, han señalado a EFE que, finalmente, Air Madrid se ha visto obligada a aumentar sus tarifas, aunque sin precisar todavía la cuantía. Entre las compañías españolas, Spanair fue la primera en incrementar sus tarifas en una media del 4,5 por ciento, ya que según el trayecto, la repercusión del precio del combustible oscila entre incrementos del 3 al 6 por ciento. Este aumento, pese a que la compañía presidida por Gonzálo Pascual tiene cubierto entre el 40 y el 60 por ciento del combustible para todo el año, se contempla dentro de la estrategia marcada por la dirección de Scandinavian Airlines System (SAS) dueña del 94,9 por ciento de Spanair, que ha anunciado un aumento de sus tarifas de entre 4 y 6 euros, en función de que los trayectos sean domésticos, europeos o transcontinentales. La segunda fue Air Europa, que en principio no tenía previsto aplicar ningún recargo a sus billetes, pero finalmente decidió un aumento de entre un 3 y un 5 por ciento, aunque asegura que en cuanto el petróleo vuelva a sus cauces normales se revisarían las tarifas y volverían a ser las habituales. Iberia, en cambio, ha desvinculado de la subida del petróleo el aumento de entre un 2 y un 3 por ciento que ha aplicado a sus tarifas durante las últimas semanas, pero no descarta hacerlo en el caso de que los niveles altos de las tarifas del crudo se mantengan mucho tiempo. Eso se debe a que la aerolínea de bandera cuenta con una cobertura de combustible para el 60 por ciento de su gasto fijado a unos precios asegurados de entre 23 y 26 dólares el barril, para el primer semestre del año. En cuanto al segundo semestre hay una cobertura del 50 por ciento del consumo con la misma horquilla de precios fijados. Respecto del mercado internacional, varias compañías aéreas han aumentado sus precios, entre ellas, British Airways, que ha gravado con 3,7 euros las rutas domésticas y en 3,4 euros el resto de los trayectos; la australiana Qantas y la neozelandesa Air New Zealand, que han anunciado incrementos de 3 a 10 euros según el destino, la suiza Swiss, un 3 por ciento, o la austríaca Austrian Airlines, en 6 euros por trayecto. (HOSTELTUR) (redacción@hosteltur.com)