Mejía destaca la falta de información adecuada sobre la oferta turístico-cultural española

El secretario de Estado de Turismo y Comercio, Pedro Mejía, ha destacado la "falta de una información adecuada" sobre la oferta turístico-cultural española, así como "importantes carencias de gestión para su correcto uso y disfrute". Durante su participación ayer lunes en el Foro Hispano Británico, que este año celebró su VIII edición bajo el epígrafe 'La cultura en el turismo', Mejía destacó que este hecho provoca situaciones como que "la rica gastronomía española sea escasamente reconocida entre la población europea, mientras que Italia y Francia, por ejemplo, son ampliamente concidos como destinos turísticos con riqueza gastronómica". Reconoció además que sólo el 10% del patrimonio cultural español está hoy en condiciones de ser considerado un verdadero producto cultural, "fundamentamente por problemas de accesibilidad y/o conservación", y ello a pesar de contar con 40 conjuntos histórico-artísticos y 11 ciudades declaradas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad. Destacó además que ante el problema que supone en algunos enclaves turísticos la aglomeración de visitantes sólo cabe incrementar la oferta turística de la zona para lograr un reparto más equilibrado de la afluencia de visitantes. En su discurso, Pedro Mejía recordó además que el turismo cultural "favorece la actividad económica más aún que el turismo de sol y playa, al desarrollarse a lo largo de todo el año", a la vez que los ingresos que genera este tiop de turismo "pueden aportar recursos notables para la conservación del Patrimonio Histórico-Artístico". Finalmente, Mejía apuntó que la política turística española actual está empeñada en favorecer el turismo cultural aprovechando una serie de oportunidades que presenta el país, como la puerta de entrada al turismo cultural que supone el turismo de sol y playa, el incremento del turismo cultural de corta duración en destinos cercanos y el hecho de contar con un idioma que es el tercero más hablado en el mundo, lo que facilita un producto por el que la Administración quiere hacer una fuerte apuesta como es el turismo lingüístico. Por su parte, el embajador de Reino Unido en España, Stephen Wright, indicó que el turismo es una "parte esencial" de las relaciones entre ambos países, recordando que el año pasado llegaron a España 16 millones de turistas británicos, siendo así el principal mercado emisor. Destacó además el incremento del 20% en el número de españoles que visitaron Reino Unido, hasta superar los 1,5 millones de personas. En todo caso, el diplomático británico insistió en la necesidad de apostar por un turismo sostenible, considerando que no seguir esa línea "sería un gran error".