Rusia presenta un superjet de pasajeros para competir por el mercado mundial

"El SSJ es más que un avión. Tenemos todo el derecho a decir que es un superjet. Sus cualidades universales le permiten cubrir vuelos regionales e interregionales", señaló Serguéi Ivanov, viceprimer ministro ruso durante la ceremonia de presentación del aparato. Ivanov, que preside la Corporación Aeronáutica Unida estatal de Rusia (CAU), monopolio que agrupa a toda la industria del sector, civil y militar, hizo estas afirmaciones en Konsomolsk, en el Lejano Oriente ruso, ante más de un millar de personas, entre ellos, numerosos inversores extranjeros. El SSJ, cuyas primeras unidades saldrán al mercado en 2008, es el primer avión civil fabricado por Sukhói, uno de los más importantes fabricantes de aviones de combate del mundo. "La mundialmente famosa casa Sukhói garantiza la fiabilidad del SSJ. Sus décadas de experiencia y la capacidad de producción son buena prueba de que podrá satisfacer al 100% la demanda mundial", subrayó. Fabricación de aviones civiles El viceprimer ministro recordó que hace casi dos décadas que la industria aeronáutica rusa no ofrecía al mundo un avión civil nuevo, añadiendo que el proyecto del SSJ ha sido completado en apenas dos años. El presidente ruso, Vladímir Putin, encargó a finales de 2006 a Ivanov la reconversión del sector aeronáutico ruso con el fin de recuperar el peso perdido tras la caída de la URSS en 1991 y competir de igual a igual con las corporaciones occidentales. En un adelanto de las intenciones de la compañía, su director, Mijaíl Pogosián, explicó que Sukhói estudia incrementar en un 50% la fabricación de aviones civiles en los próximos tres años. El nuevo prototipo ruso tendrá un coste aproximado de 25 millones de dólares (más de 17,7 millones de euros), en torno a un 15% menos que los aviones fabricados por la corporación brasileña Embraer. El constructor aeronáutico brasileño, que controla el 40% del sector de aviones de hasta 90 pasajeros, ocupa la tercera posición mundial en cuanto a pedidos, tras Boeing y Airbus. El superjet pasará las primeras pruebas de vuelo dentro de 2 ó 3 meses, mientras los primeros aviones, nueve en total, se ensamblarán en 2008; 30 en 2009; 60 en 2010 y, a partir de esa fecha, se mantendrá anualmente esa cantidad. Una de las características más particulares del superjet de Sukhói es que tiene una vida útil en vuelo de 70.000 horas, cuando la media habitual de los aparatos en servicio es de 30.000. Se fabricarán tres modelos del superjet, con capacidad para transportar entre 75 y 95 pasajeros. Así mismo se estudia la introducción de modificaciones para aumentar hasta 115-120 el número de asientos, otro modelo que podría empezar a fabricarse en 2012. Ivanov señaló que Sukhói ya tiene en cartera 73 pedidos -61 de rusos y 12 extranjeros-, por unos 2.000 millones de dólares (1.400 millones de euros), entre ellos, la compañía nacional Aeroflot con 30; AirUnion Alliance con quince; Dalavia con seis; ItAli con diez, y Armavia con dos. Sukhoi estima en 5.700 unidades la demanda mundial de aviones de pasajeros para vuelos regionales hasta 2024 y que entre 800 y 1.200 unidades corresponderían al SSJ (un 70% para el exterior). En este proyecto, Sukhói cuenta con un socio estratégico, la italiana Alenia Aeronáutica (fundada por Fiat y actualmente en manos del Grupo Finmeccanica), que ya ha creado con la compañía rusa una empresa mixta para la venta de los SSJ en los países desarrollados y también para ofrecer servicios de mantenimiento en todo el mundo. También compañías francesas participan en el proyecto del superjet: Snecma en la fabricación de los motores y Thales en la aviónica. Además, Sukhói coopera estrechamente con la corporación estadounidense Boeing, que ejerce de consultora en la capacitación de personal y la creación de un centro de mantenimiento de los SSJ.