Nace la Agencia Catalana de Turismo, con mayor presencia del sector privado

El conseller aseguró que la participación privada "no tiene techo" y que las empresas que participen no deben ceñirse sólo al ámbito hotelero, sino que también debe incluir a compañías de transporte y a las dedicadas a alimentación y bebidas. La Agencia tendrá dos órganos de gestión: un consejo general para debatir y consultar propuestas y un consejo de dirección que tendrá el poder de control y decisión de la entidad, y cuya participación está condicionada a la realización de una aportación económica a la agencia aún sin definir. El objetivo es que la agencia, que tendrá un período de implantación de seis meses, sea "más útil, más eficiente y más profesional" en las actividades de impulso y promoción del turismo en Catalunya. La opinión del sector Sin embargo, algunos profesionales destacados del sector, como Joan Gou, director general de Viatges Marítim, consideran que a pesar de haber sido aprobada "legítimamente", por el mecanismo democrático de la aceptación de los resultados mayoritarios, la de la Agencia Catalana de Turismo "no será una ley deseada por una parte del sector en la forma de su redactado final". Según expone Joan Gou en algunos de los blogs turísticos más relevantes, ello "debería llevar a la reflexión del conseller, quien promulga y defiende la mencionada ley". Conocedor en su anterior mandato de la dura oposición del sector agrega, "nuevamente insiste en ello". Explica que la ley en sí se solapa ya con la regulación existente, pero se promulga bajo un sólo objetivo, facultar a la administración la comercialización y distribución de productos y servicios turísticos, lo que significa, según Gou, "trasladar el modelo de turismo de Barcelona a toda Cataluña". En opinión del miembro de la Asociación Catalana de Agencias de Viajes (ACAV), los agentes de viajes, en concreto el receptivo, ve en la aprobación una clara "injerencia" de la Administración a la actividad. Gou se muestra contrario a que la Administración vaya a ser su competidora, ya que en su opinión, "están para servirnos", y a que los recursos públicos vayan a ser utilizados contra una actividad ya existente. Además, se pregunta "por qué esta ley de comercialización y distribución está destinada a beneficiar y subvencionar únicamente a un determinado sector específico del ámbito turístico". Lo único que Joan Gou ve "positivo" en la aplicación de esta ley es que "a lo mejor, siendo la administración contratante de plazas hoteleras y destinos, acabe al final dándose cuenta que el producto final a ofertar no se ciña a la realidad promulgada por los demandadores de subvenciones promocionales". Rocío Noriega (actualidad@hosteltur.com)