Utopía o alternativa para una economía en crisis. UNO
7 marzo, 2010 (13:57:39)“Utopía o alternativa para una economía en crisis”. UNO
RECORDANDO UN VIEJO SUEÑO
Con este post voy a iniciar una serie, en la que voy a ofrecer, a las jovenes generaciones del turismo, un viejo sueño de un profesional hotelero.
Creo que la actual crisis, convierte al año 2010, en la oportunidad ideal para poner en marcha esta vieja idea, dado que en estos momentos hay un buen número de establecimientos hoteleros en manos de bancos y empresas incapaces de sacarles partido, y tanto bancos como algunas de esas empresas, necesitan encontrar quien pueda explotar esos establecimientos con un mínimo de garantías de éxito, relativamente fácil de conseguir, si se unen a un proyecto común, por un lado las ilusiones de la juventud y por otro la experiencia acreditada de algunos buenos profesionales.
Desde mi regreso a España en 1966 después de un periodo de prácticas en Inglaterra e Irlanda, una vez logrado mi Diploma de Gerencia Hotelera, en la Escuela Nacional Superior de Hostelería de la Casa de Campo de Madrid, soñe con la posibilidad de trabajar en mi propia empresa.
La ocupación de puestos de responsabilidad, normalmente bastante bien pagados, unido a la necesidad de sacar una familia adelante, fue posponiendo la idea de mi propia empresa, para entrar en el pensamiento de una empresa en la que en unión del resto de los trabajadores de la misma, pudiera sentirme propietario en proporcióna mi aportación laboral y de capital a la misma. Con esa idea en la cabeza, en 1974 tuve una reunión con compañeros miembros de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Escuela Superior de Hostelería de Madrid, proponiéndoles la creación de una sociedad, en la que todos los trabajadores serían socios con aportación de capital proporcional al nivel correspondiente al puesto de trabajo que ocupasen en la misma; había desarrollado el proyecto completo, con Estatutos, Reglamento de Régimen Interno y estudios de viabilidad del primer establecimiento para la puesta en marcha del proyecto y de sus posteriores fases de expansión.
El proyecto gusto a todos los presentes en la reunión, pero la situación laboral y segura de la mayoría, unida a las obligaciones familiares de muchos de nosotros, dejo hibernado el proyecto. Hibernado, pero nunca olvidado, ya que lo he ido actualizando en más de una ocasión, así que nuevamente lo presente a la sección junior de la Asociación Nacional de Directores de Hotel en la asamblea de dicha Asociación en 1.993, volvió a gustar pero no se llego a tomar decisiones de profundizar en el proyecto, ni por juveniles ni por Seniors.
Han pasado los años y en la pasada primavera Johana Cavalcanti me sorprende con el post:
Cambio Radical. La Innovación que ha Llevado al Éxito. Publicado el 19 de Abril de 2009.
Haciendo que nuevamente retome la idea, por cuanto el proyecto con el que he soñado toda mi vida, recoge casi todo lo que se hace en Semco, empresa a la que se refiere el post mencionado, y si un proyecto de estas características ha sido posible en Brasil ¿Por qué no va a ser posible en España?
Podéis encontrar en el post de Johana los comentarios que hubo en aquel momento, pero como todo en Internet, pasado el momento, pasada la novedad, no se ha vuelto a tratar del tema, todos estamos muy ocupados en el día a día, y los proyectos que no son propios, se van quedando en el olvido, no siendo fácil llegar a ellos por parte de nuevos usuarios, condicionados como todos por las demandas del momento, sin tiempo para mirar lo que va quedando atrás.
Entresaco a continuación algunas referencias de aquellos comentarios, que se pueden leer integramente en el link de aquel post.Cuando tratamos de considerar las posibilidades de que en el turismo pueda existir una empresa sin estructura piramidal y sin paternalismos propios de otros tiempos, en que todos sus integrantes sean responsables de su propio futuro, nos ponemos a discutir del “sexo de los ángeles”, ¿Quien es peor, empresario o trabajador?
Ni los empresarios son tan malos, como a veces los consideramos, ni los trabajadores hermanitas de la caridad, dispuestas a darlo todo por nada, y poner la mejilla izquierda cuando le hayan dado un sopapo en la derecha.
Todos deberían tener en consideración, que el empresario pone en riesgo fortuna, su capacidad de crédito, y el bienestar de su familia, con el objetivo de ganar dinero.
No es objetivo de un empresario crear puestos de trabajo, ni dar calidad, ni tener empleados contentos, ni cumplir con los requisitos legales que condicionan el ejercicio de la actividad en la que pueda estar inmerso.
SU OBJETIVO: ES GANAR DINERO
El problema es que para cumplir ese objetivo, se va a encontrar con un problema básico:
SI QUIERE GANAR DINERO
va a tener que poner en juego los medios necesarios para hacerlo, y entre esos medios, están:
• Crear puestos de trabajo, ya que sin ellos, no podrá desempeñar su actividad.
• Dar calidad, ya que sin unos servicios de calidad, no tendrá clientes.
• Tener empleados contentos, porque si no lo están, le van a echar a los clientes en lugar de atraerlos.
• Cumplir con los requisitos legales que condicionen el ejercicio de la actividad, porque podrá tener múltiples problemas, en formas de sanciones económicas, cierre de instalaciones., inhabilitación para el ejercicio de esa actividad, etc., caso de no hacerlo.
Creo que es importante que cuando como empresarios, trabajadores, consultores o simples analistas de este apasionante mundo del turismo, hablemos de cómo funciona, no confundamos LOS FINES con LOS MEDIOS.
Con el anterior alegato, quiero significar que las cosas, no son tan puras como a más de uno gustaría, y que llevar el barco a buen puerto, requiere un buen capitán, acompañado de buen timonel, buen jefe de máquinas y mejor tripulación, para que los pasajeros (nuestros clientes) lleguen a puerto felices y satisfechos, y quieran volver a viajar con nosotros.
El capitán (director del hotel) es quien está obligado a garantizar el adecuado rumbo de la nave para llegar a puerto, y quién deberá marcar dicho rumbo, sacando el mejor partido de su tripulación, ya que deberá rendir cuentas ante el armador (empresario) del uso que ha hecho de la nave y tripulación que puso a su cargo.
Lo que tratamos de discernir, es si un cambio radical en la estructura de la empresa y sus formas de gestionarla para hacer frente a los nuevos retos, es posible en nuestro mundo del turismo.
Creo firmemente que la mayoría de los trabajadores pueden llegar a integrarse de forma responsable en las funciones que les puedan corresponder en el desarrollo de la actividad de la empresa, y que la mayor parte de fallos que haya en ese terreno, serán más culpa del estilo de dirección, que del propio empleado.
Hasta donde he podido contrastar, la mayoría de los trabajadores inician su actividad en una nueva empresa con ilusión, comenzando a fallar, a medida que sus jefes inmediatos les van decepcionando, y los superiores de éstos no hacen nada por reciclar la situación.
El que una empresa funcione mejor o peor, no es un problema de normas, herramientas o tecnología, en la mayoría de los casos ni siquiera financiero, normalmente es un problema de análisis de situación, de adaptación a esa situación y sobre todo de personas.
Y ahora, todos aquellos que os quejáis de la falta de oportunidades, que os consideráis preparados, y que no queréis ser explotados por empresarios sin claros objetivos sobre su propia empresa, los que artos de pedir una oportunidad, y considerándo que tenéis suficientes conocimientos, habéis decidido iniciar un proyecto de formación o consultoría, sin clara visión de hasta donde podréis llegar, permitirme que os incluya lo que para Albert Einstein era la crisis:
“No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a las personas y países, porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis, se supera a si mismo sin quedar “superado”.
Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro, Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla.”
Si algunos estáis de acuerdo con el pensamiento de Albert Einstein, aquí tenéis un reto: ¿Os atrevéis a formar parte de un proyecto en el que seríais los responsables de vuestro propio destino, en el que podríais demostrar que estáis preparados y tenéis capacidad para demostrar a quienes os han precedido en este mundo del turismo, que sois capaces de hacerlo mejor que ellos? Y sobre todo, ¿Creéis en el futuro del turismo, y por tanto en vuestro propio futuro?
Por mi parte estoy dispuesto a poner a vuestra disposición un proyecto desarrollado a lo largo de muchos años, para la creación de una empresa turística con vocación de crecimiento, en la que comenzando con el sector hotelero, se crecería transversalmente hacia la restauración, bares y cafeterías, agencias de viajes, medios de transporte, empresas de servicios, etc., con el fin de controlar todo el espectro del servicio turístico, que permita garantizar la calidad del servicio ofertado a los clientes.
El primer centro de esta empresa, sería un establecimiento hotelero en categoría de tres o cuatro estrellas, no menos de doscientas habitaciones y con instalaciones adecuadas para poder convertirlo en el centro de formación en que se realizarían las prácticas de los partícipes o socios fundadores, que pasarían a formar los cuadros directivos de esta empresa, una vez superadas las prácticas de polivalencia, de acuerdo con el proyecto de prácticas que se menciona en el post: ¿Existen programas estilo anglosajón como "Training Manager"?, que se adaptarían a la experiencia y formación efectiva de ese primer grupo de participes o socios fundadores, para darles paso a los nuevos establecimientos de cuya gestión pudiera hacerse cargo esta empresa.
La estrategia para adquisición de la explotación de los primeros establecimientos estaría dirigida al alquiler con opción de compra, el contrato de alquiler por no menos de diez años, y las opciones de compra se trataría de darles una vigencia no menor de tres años y posibilidad de ampliar su vigencia a la total duración del contrato de alquiler.
Continuaremos esta presentación con el post titulado:
“Utopía o alternativa para una economía en crisis”. DOS
INTRODUCCIÓN Y BASE MOTIVACIONAL (parte primera)
Si le ha interesado el contenido de este post, puede encontrar más temas de interés por medio del INDICE de mis post en:
INDICE DE POST DE MIGUEL ANGEL
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