Turismo estival. Felicidad
3 junio, 2015 (10:09:26)"...Cuando regrese el verano nos traerá aquel cielo de la infancia, ancho y luminoso..."
Con la llegada del verano la industria turística trabaja casi al 100%, lo ideal sería que se consiguiese durante todo el año y más aún en países como el nuestro. La red de empresarios y profesionales del sector junto con las distintas administraciones trabajan en ello. Las compañías aéreas presentan sus mejores paquetes turísticos, los hoteles lucen brillantes y las pymes se acicalan bajo el signo del verano como adorno bellísimo al perfil de nuestro mapa.
El turismo estival entronca todo, música, museos, gastronomía, deporte, cine...esos cines de antaño. Es difícil encontrar ya terrazas de "cine de lagartija" aquellas en las que disfrutábamos de sesión doble, una juvenil y otra de adultos al aire libre y embobados con las lagartijas o salamanquesas típicas de éste tiempo en las paredes. En Cataluña, Valencia y Baleares denominados "dracó".
El mercado turístico se mueve por ciclos y qué duda cabe que el verano es LA INYECCIÓN DE LA FELICIDAD... y las únicas que mantienen la calma en éste universo turístico son las salamanquesas, sí señor. Todo esto no deja de ser un espejismo pues al mismo tiempo y como todo el mundo sabe Junio será siempre el comienzo del invierno...y otra vez vuelta a los mantecados, todo impedimento tiene su espejo. Pero ahondemos en esa felicidad. El verano turístico es época de excelencia expresiva, aturdimiento humano y descripciones económicas. Y las tardes brillan muy azules, el cielo es un patio de luz crepuscular en puro terciopelo. El principio del verano es el punto más feliz , en los lugares de mar, cerca del mediterráneo , atlántico o cantábrico la brisa es más fresca y húmeda; el rumor y el olor del mar todavía pueden casi tocarse...dentro de poco desaparecerán bajo la multitud.
Para algunos viajeros la felicidad estival nos sumerge en todas sus variaciones posibles, sin más pausa que la de tomar aliento y respirar, o respirarnos. Para otros viajeros la felicidad es recordar aquella casa con ventanales y jazminero de la infancia, aquel destino turístico o llegar al conocimiento a través de los lugares o rutas nuevas y lo que ellos conforman. Expediciones a la felicidad por ratitos, de la mano de profesionales del sector. Paseos de todos los colores , colores que abrazan, ciudades y núcleos nuevos , rutas especializadas que visitar despacio, sintiendo las pisadas , ensanchando las distintas texturas bajo nuestros pies y ese olor de verano en los que los días intensos ganan a las noches. Pero ¡ ah ! las noches...lugares mágicos entre la dureza de la piedra y la frialdad del hielo.
"....Cuando regrese el verano nos traerá aquel cielo de la infancia, ancho y luminoso ..."( Ismael Serrano)
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