El Comité de "sabios" del turismo recomienda al Gobierno balear más promoción

El Comité de "sabios" del turismo recomendó ayer al Gobierno balear que invierta más en promoción. El Ejecutivo autonómico pondrá en marcha de «manera inmediata» una campaña publicitaria de las Islas Baleares en la televisiones de ámbito nacional para atraer a turistas españoles y, una vez que concluya el conflicto bélico en Irak, comenzará una intensa iniciativa promocional en Alemania e Inglaterra. El conseller de Turismo, Celestí Alomar, afirmó que su departamento dedicará «lo que haga falta» para ambas iniciativas, que pretenden frenar los efectos de la guerra –que por el momento se desconocen– y recuperar la llegada de visitantes en los próximos meses, sobre todo en septiembre y octubre. El Ejecutivo autonómico quiere «intensificar» la imagen de Baleares en los principales países emisores de turistas hacia el archipiélago –Alemania y Gran Bretaña–, de manera principal desde las oficinas y agencias de turismo. La publicidad de Baleares en las televisiones de ámbito nacional tendrá dos fases: un primera de unos quince días y, dos semanas después, una segunda de similares características con la intención de mostrar que las Islas, «más que sol y playa», son un lugar para disfrutar a lo largo del año. Alomar realizó estas declaraciones a los periodistas después de la reunión celebrada esta mañana (por ayer martes) en Palma por dos comités de expertos sobre turismo, el del Centro de Innovación y de Tecnologías Turísticas de Baleares (CITTIB) y otro integrado por especialistas internacionales. Durante este encuentro se analizará la realidad turística balear y posibles actuaciones políticas futuras, así como las repercusiones de la guerra en los mercados emisores. El presidente de Baleares, Francesc Antich, anunció que estos dos comités se reunirán cada seis meses y que la Comisión de Seguimiento de la Guerra de Irak tendrá un carácter permanente. En otro orden de cosas, Simón Pedro Barceló, copresidente del Grupo Barceló, rechazó ayer la posibilidad de que el Gobierno arbitre medidas excepcionales para reactivar al turismo tras el descenso de la actividad generada por la guerra de Irak. «El sector tiene que alinearse con las demandas de mayor nivel de competitividad de todo nuestro país y no plantear medidas excepcionales para nuestro sector, sino que deben ser decisiones que vayan en beneficio de toda la economía», dijo Barceló a Efe. «Sólo en último extremo y ante una crisis grave como las que han vivido las compañías aéreas, sí sería recomendable una intervención directa de la Administración», consideró el empresario. Pero, «si no es así», añadió, «es mucho mejor que la actividad económica se rija por normas generales para todos los subsectores, incluido el turismo». El Grupo Barceló, con sede en Palma, cuenta con más de 65 hoteles repartidos en once países y es una de las mayores cadenas hoteleras españolas. Además, se ha convertido en un operador global de turismo con una red de agencias de viajes y con participación en una compañía aérea. Simón Pedro Barceló calificó la situación en general de «complicada, más aún la internacional, que es extraordinariamente grave, lo cual repercute de forma directa en la economía», dijo. Explicó que el Grupo Barceló había acabado el mes de marzo «según las expectativas previstas». «El primer trimestre de 2003 ha sido para nosotros menos malo que el de 2002. Ese año, y en ese periodo concreto, tuvimos un impacto gravísimo por los acontecimientos de septiembre de 2001», afirmó. Añadió que «aquellos negocios que se contratan más de última hora, como puede ser los hoteles de ciudad están viviendo la situación con un mayor impacto». (Diario El Mundo-El Día de Baleares, 09/04/03)