Por Ostelea Tourism Management School, en Economía

Turismo Wellness como respuesta a la toxicidad del ámbito laboral

19 septiembre, 2019 (13:32:05)

Los entornos laborales adversos generan varias afectaciones a nivel psicológico y físicoLa creciente búsqueda de experiencias que contribuyan al estado físico, psicológico y/o emocional, pareciera ser un síntoma de la necesidad de recuperarse de entornos de carácter nocivo como podría ser el ámbito laboral.

19/09/2019, Ostelea, School of Tourism & Hospitality

Hoy en día es incuestionable el nivel de concienciación sobre la importancia de mantener un estilo de vida que garantice la salud y el bienestar. Tanto es así, que cada vez más el turismo de salud (médico y wellness) está presente en la oferta de destinos maduros y emergentes. La creciente búsqueda de experiencias que contribuyan al estado físico, psicológico y/o emocional, pareciera ser un síntoma de la necesidad de recuperarse de entornos de carácter nocivo como podría ser el ámbito laboral.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), los entornos laborales adversos generan varias afectaciones a nivel psicológico y físico. Por ejemplo, en el campo de la salud mental, los mayores riesgos son la ineficacia de las políticas de seguridad y protección de la salud, la rigidez en los horarios, el limitado poder de decisión del trabajador en su área de actuación y la falta de claridad de los objetivos y estrategias empresariales. Estas situaciones pueden propiciar hábitos que reducen la productividad laboral y los beneficios económicos, tales como el absentismo, las bajas temporales y el consumo de alcohol y otras drogas.

Teniendo en cuenta que el turismo es uno de los sectores económicos que más contribuye al PIB en España, así como que los trabajadores juegan un rol fundamental en la prestación del servicio y la satisfacción del cliente, resulta oportuno valorar cómo las empresas turísticas contribuyen y promueven la salud y el bienestar entre sus trabajadores. Especialmente teniendo en cuenta que, de acuerdo a la OMS, por cada 1 US$ invertido en el tratamiento de trastornos mentales frecuentes, se obtiene un rendimiento de 4 US$ en la mejora de la salud y la productividad.

Con el propósito de ofrecer una guía a las organizaciones, la OMS recomienda que cuenten con un plan integral de buenas prácticas que proteja y promueva la salud y el bienestar de todos los trabajadores. En este sentido, invita a las empresas a estimular estilos de vida saludables en el entorno laboral. A su vez, destaca cinco claves para la consecución de entornos laborales saludables:

Compromiso de los máximos órganos directivos. Más allá de declaraciones programáticas, resulta imprescindible que la dirección destine recursos y ofrezca apoyo a las políticas y acciones que contribuyen a la salud y el bienestar de los trabajadores.Participación efectiva de los trabajadores y sus representantes. No basta con informarles y consultarles sobre los planes y acciones a desarrollar en esta área, por el contrario, en buena medida la efectividad de los mismos está vinculada al nivel de participación y apropiación por parte de los trabajadores.Ética empresarial. Además de observar el marco legal vigente respecto a la seguridad y la salud en el trabajo, las empresas vienen llamadas no sólo a evitar riesgos, sufrimientos y daños, sino a generar entornos de confianza con y entre sus trabajadores y a promover aquellas acciones que contribuyan a su salud.Garantizar la mejora continua. Al igual que en el resto de áreas empresariales, las políticas y planes que promueven entornos laborales saludables deben enmarcarse en procesos de evaluación periódica que aseguren la eficacia de los mismos a largo plazo.Sostenibilidad e integralidad. Muy vinculada con la primera de las claves, esta recomendación exige que los directivos cuenten con una visión holística de la salud en el entorno laboral, de modo que, garantizarla y promoverla sea uno de los filtros por el que pasen todas las decisiones empresariales.

Imagen nota de prensa Hosteltur