Polémica por el “sueño” de llevar la Fórmula 1 a Colombia

El alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo; y la gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, anunciaron que el destino colombiano se encuentra en negociaciones con la empresa Liberty Media, propietaria de los derechos de la Fórmula 1, para ser sede de una fecha de la mayor competencia automovilística a nivel mundial.

De concretarse, sería la tercera ciudad de América Latina en recibir este gran evento masivo, junto a San Pablo y Ciudad de México. Y sobran motivos para apostar a captar un acontecimiento de esta magnitud: según Pumarejo, son 22 ciudades las elegidas para el campeonato internacional, a las cuales ingresan unos 60.000 visitantes en 10 días, lo que significaría “duplicar la cantidad de turistas” habituales de un destino como Barranquilla. Además, llegan “desde más de 100 países” y cada uno gasta “unos US$ 660 por día”.

¿La Fórmula 1 puede correrse en Barranquilla?

La última edición realizada en México (del 5 al 7 de noviembre de 2021), por ejemplo, generó un impacto estimado de US$ 700 millones; una amplia promoción global; y muy altos niveles de ocupación hotelera en la ciudad y sus alrededores (más del 90%). Incluso las operadoras armaron paquetes combinando Fórmula 1 en la capital y luego playas en el Caribe o el Pacífico.

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Por eso, rápidamente la iniciativa cosechó apoyos. El primero de ellos fue el del propio presidente colombiano, Iván Duque, quien aseguró que “acompaña el sueño” de la Alcaldía de llevar la Fórmula 1 a Barranquilla.

Y más tarde se sumó la Asociación Hotelera y Turística de Colombia (Cotelco), que emitió un comunicado en el que afirma: “Ya lo hemos manifestado en otros escenarios y reafirmamos nuestro compromiso como aliados de la ciudad de Barranquilla en la realización de este importante evento deportivo. Estamos seguros de que este tipo de espectáculos de talla mundial aportan a la promoción turística del destino y son generadores de empleo y desarrollo, aportando al posicionamiento del Caribe colombiano, estimulando la visita de nacionales y extranjeros no sólo a Barranquilla, sino además a Cartagena y Santa Marta”.

Vale señalarlo, este año hay elecciones en Colombia: el 13 marzo se realizarán los comicios legislativos; y el 29 de mayo, los presidenciales. Por esta razón, resultó inevitable que el anuncio se leyera como un acto de campaña más, y la oposición esbozó numerosas críticas. ¿Qué señalan?

Uno de los mayores referentes opositores, Gustavo Petro, le respondió a Duque con un juego de palabras: “Te pregunto, ¿no deberías acompañarnos en el sueño de que Barranquilla sea una ciudad sin hambre?”. Y algo similar publicó en su cuenta de Twitter el senador (de Colombia Humana), Gustavo Bolívar, quien aseveró: “Propongo que Barranquilla no tenga Fórmula 1, sino Fórmula 3. F-3 = 3 comidas diarias para todos los y las barranquilleras”. Pero muchos otros dirigentes más coincidieron en este punto. ¿A qué vienen estas críticas?

Según el Departamento Nacional de Estadística (DANE), en octubre pasado 3 de cada 10 hogares en el país no alcanzaron a consumir tres comidas diarias. De hecho, el Caribe es la región con mayor índice de desnutrición de Colombia: en Cesar, con Valledupar a la cabeza, alcanza el 49% de los hogares; en Sucre, con Sincelejo, el 41%; en Atlántico, con Barranquilla, el 33%; y en Bolívar, con Cartagena de Indias, el 31%.

En México, la Fórmula 1 dejó US$ 700 millones y una ocupación hotelera del 90% en 2021.

Desde luego, los defensores de la competencia explican que un evento de esta naturaleza genera promoción, turismo y empleos, lo cual justificaría la inversión pública en llevar la carrera a Barranquilla. Pero, ¿cuánto sale llevar la Fórmula 1?

Cuenta la revista Forbes que Miami, la cual será sede por primera vez, gastó unos US$ 977 millones por un contrato a 10 años. Eso, aseguran los opositores, equivale a unos COL$ 4 billones, mientras que todo el presupuesto de Barranquilla para 2022 fue de COL$ 4,16 billones.

Pero, finalmente, existe un factor más a tener en cuenta y es la propia capacidad de la ciudad. Según el propio alcalde, el evento atrae a unos 60.000 turistas en 10 días, pero la ciudad cuenta con 15.000 plazas distribuidas en unos 200 hoteles, de acuerdo a lo indicado por el Capítulo local de Cotelco. Más allá de que se trate de una gran metrópolis, ¿hay acaso una incompatibilidad de escalas? Ciudad de México, por caso, tiene unas 70.000 camas; y San Pablo, casi 1.400 hoteles.

En cambio, por el momento la conectividad aérea no fue señalada como un inconveniente: sus rutas internacionales (aunque mayormente corporativas y emisivas) serían suficientes, mientras que las conexiones domésticas para llegar desde Bogotá o cualquier otro aeropuerto también son muy ágiles.