España: Encuentro al máximo nivel entre los presidentes de Baleares y de Sol Meliá para rebajar el clima de tensión

Después de meses de tensas y agrias polémicas entre el Ejecutivo de Antich y el presidente del grupo Sol Meliá, Gabriel Escarrer, que tuvieron su punto álgido en el marco de la Feria Internacional de Turismo (Fitur), las relaciones podrían reconducirse para buscar soluciones a los tiempos de crisis que golpean al archipiélago balear en los principales mercados emisores, Alemania y Gran Bretaña. Según diferentes fuentes pulsadas por este periódico, «el presidente del Gobierno balear, Francesc Antich, ha mantenido contactos durante las últimas horas con el máximo responsable de la primera cadena hotelera nacional y mallorquina, Gabriel Escarrer». Durante el encuentro se pusieron sobre la mesa asuntos tan candentes como «el cobro de la ecotasa, que a partir del próximo 1 de mayo tiene previsto aplicarse en los establecimientos hoteleros de las Islas, y la deficitaria política turística y promocional que durante los últimos meses se ha llevado a cabo tanto desde la Consejería de Turismo como del Ibatur». Un portavoz del Gobierno balear también admitió que «desde la celebración de Fitur que tuvo lugar en Madrid a finales del pasado mes, Antich se han reunido con diferentes representantes de la hostelería balear». El día que Francesc Antich hizo público la fecha para el cobro de la ecotasa, en el stand de Baleares se sucedieron diferentes encuentros entre un sector de la Federación Hotelera de Mallorca, encabezada por el ex consejero de Turismo, Jaume Cladera, Bernardo Quetglas y Pedro Pascual, entre otros, y los máximos representantes de la cúpula de la patronal, Pedro Cañellas, Ignasi Esteve y Ferrán Porto. El grupo de hoteleros, liderados por Cladera, propuso al máximo representante de la Federación, Pedro Cañellas, «tomar la iniciativa e intentar negociar con el Ejecutivo balear un retraso en la aplicación del impuesto turístico». «Es necesario intentar tender puentes con el Govern para hacerle comprender que aplicar la ecotasa en estos momentos es un auténtico suicidio», explicó uno de los hoteleros presentes, quien advirtió que «aquí nadie se está cuestionando la ecotasa, un impuesto injusto por la forma elegida para su aplicación, sino que hay que acercar y aproximar las posturas para bajar los niveles de crispación». Estas mismas fuentes alertaron sobre la «dificultad que entraña el cobro del impuesto turístico esta temporada, ya que todos los folletos están en la calle y parte de los paquetes turísticos vendidos». Un golpe de timón a la desesperada para intentar que «la imagen de Baleares no se vea aún más deteriorada». En esta línea, apuntan fuentes próximas al Pacto de Progreso, «podría estar trabajando el equipo de Antich para arbitrar la mejor solución que contente a todas las partes». No obstante, desde la patronal hotelera unánimemente han dejado claro que «iniciarán la batalla legal contra la ecotasa». Pero, la bomba del día en Madrid la protagonizó Gabriel Escarrer, quien pidió la desaparición de la Consejería de Turismo por su ineficacia. «El Govern tiene que centrarse en mejorar las infraestructuras, lanzar mensajes positivos y promocionar adecuadamente el destino como el mejor enclave vacacional». Así de rotundo analizó Escarrer la encrucijada en la que se encuentra la industria turística de Baleares. Para el presidente de Sol Meliá, «falta fe en el turismo, profesionalidad y voluntad política», y sin embargo, sobra «prepotencia, utopías y desprecios hacia el turismo. La ecotasa sólo es una baza electoral». (C.D./T.B., diario El Mundo-El Día de Baleares, 27/02/02)