Marcados por las dudas, la precipitación y la desinformación

UNAV hace balance negativo de los 100 días de la Ley de Viajes Combinados

Publicada 25/04/19 -Actualizada 20/05/19 02:01h
UNAV hace balance negativo de los 100 días de la Ley de Viajes Combinados
  • Las principales incertidumbres están relacionadas con la forma de llevar a cabo la adaptación a la práctica y la información precontractual
  • A las agencias les preocupa que que nuestra normativa haya excedido a la europea en lo relativo a las garantías
  • La ley sitúa a las agencias como canal más seguro pero no resuelve el intrusismo

La Ley de Viajes Combinados cumple 100 días desde su entrada en vigor. Por ese motivo, la Unión Nacional de Agencias de Viajes, UNAV —una entidad que integra a 120 miembros y representa a un total de 2.800 puntos de venta— efectúa un balance de este periodo, marcado por las dudas, la precipitación y la desinformación de una norma que, incluso, el Gobierno considera que “quizá se tramitó demasiado rápido”, tal y como reconoció la ministra Maroto en la clausura del XXII Congreso de Turismo de UNAV, quien ese día anunció, precisamente, que podría ser revisada, al considerar que todavía caben “mejoras”.

“La sensación general es que la aprobación de la normativa se llevó a cabo de forma apresurada, sin conceder tiempo suficiente a las agencias para su adaptación y sin conocimiento de la práctica cotidiana del sector, implementando obligaciones de muy difícil cumplimiento”, asegura Mª Dolores Serrano, del Servicio Jurídico UNAV Legal-Deiurem, que desde su entrada en vigor ha atendido medio centenar de peticiones concretas de aclaraciones formuladas por los asociados a la entidad decana de las agencias de viajes.

En opinión de esta jurista, “las principales dudas están relacionadas con la forma en la que deben llevar a cabo la adaptación en la práctica y, en concreto, con las modificaciones que debe recoger el contrato de viaje combinado, la nueva información precontractual que deben facilitar así como sobre las garantías en caso de quiebra o insolvencia y los nuevos derechos de los viajeros en los casos de desistimiento”.

También preocupa a las agencias que nuestra normativa haya excedido a la europea en lo que a las garantías se refiere, exigiendo que se cubra no sólo la insolvencia y la repatriación sino también la correcta ejecución de los servicios, porque entienden que es costosa e innecesaria

Consideran asimismo que es una ley que no resuelve el problema del intrusismo, un asunto que daña mucho a las AAVV. Se da la circunstancia, además, de que la misma ley europea se ha interpretado con matices diferentes en varios países miembros.

Para tratar de mitigar las carencias de la implantación de la nueva ley, UNAV —al igual que otras entidades asociativas y firmas vinculada a la industria— ha llevado a cabo en estos primeros 100 días diversas actuaciones, entre las que destacan un seminario celebrado en la sede de CEIM, titulado “Modificación de la normativa aplicable a los viajes combinados y regulación de los servicios de viaje vinculados”, al que asistieron cerca de 200 personas, entre representantes de agencias y proveedores.

Esta misma ley, junto a otros temas, fue asimismo objeto de análisis en la mesa redonda organizada en el transcurso del XXII Congreso de Turismo, en Segovia, en la que intervinieron un grupo de 'millennials’ junto a otros miembros de la industria de turismo y los viajes. La representante del servicio jurídico UNAV Legal-Deiurem, que fue la encargada de moderar este debate, considera que también hay un gran desconocimiento de la nueva normativa por parte del público, tal y como pudo verse en el desarrollo de ese debate, indica Serrano.

Para analizar la implantación de la nueva ley, UNAV, además, ha mantenido distintas reuniones de trabajo con diferentes estancias administrativas, principalmente con la Direccion General de Turismo de la Comunidad de Madrid

En opinión de Carlos Garrido, presidente de UNAV, “la Ley de Viajes Combinados ha situado a las agencias como el canal más seguro y mejor para gestionar los viajes. Y eso es un valor incuestionable. Sin embargo, hay que reconocer que su desarrollo y aplicación están generando mucha confusión, fruto quizá de la precipitación con la que se tramitó la ley. Por eso, el anuncio que hizo la ministra Maroto en la clausura de nuestro congreso, indicando que podría ser revisada, fue una gran noticia. Esperamos que el Gobierno que salga de las urnas, sea cual sea su signo, tenga en cuenta este tema y corrija los aspectos más controvertidos, de manera que puedan llevarse a cabo las modificaciones que todos deseamos, con calma y con la suficiente información, tanto para los clientes como para las agencias de viajes”.

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