Benidorm resiste y cierra mayo con un 83% de ocupación, un 1% menos

Los datos recabados por BigDataHOSBEC por quincenas, recoge que Benidorm ha alcanzado el 85,2% de ocupación media durante la segunda quincena de mayo, 1,8 puntos menos que el mismo período en 2018.

En el conjunto del mes, la ocupación se sitúa en el 83,2%, que es la más baja de los últimos seis años en un mes de mayo, lejos del récord histórico del 88,70% para este mes registrado en 2016.

Los clientes británicos vuelven a situarse como el principal mercado en Benidorm por volumen de pernoctaciones, representando un 46,4% de la cuota de mercado en este periodo y superando a los españoles que se quedan con un 41,3%.

Tras Reino Unido, dentro de los mercados internacionales, se sitúa Bélgica en el ranking de visitantes extranjeros con un 3,9%, seguido de Holanda con un 2,6%, Irlanda con un 1,6%, y Portugal con un 1,1%.

La previsión de ocupación de los hoteleros de Benidorm para la primera quincena de junio roza el 86%.

Por categorías, los hoteles de 2 estrellas son los que registran una mayor ocupación durante esta quincena, alcanzando un 90,6%, seguidos de los establecimientos de 3 estrellas que han registrado un 87,4%, los de 4 estrellas superior con un 84,2% y, finalmente, los hoteles de 4 estrellas han obtenido un 82,5% de ocupación.

La oferta hotelera abierta y disponible para la comercialización en Benidorm ha rozado las 40.000 plazas de las 41.000 existentes en este periodo.

La previsión de ocupación para la primera quincena de junio se sitúa en estos momentos en el 85,7%.

Resistencia del turismo

El presidente de HOSBEC, Antonio Mayor, ha destacado “la resistencia del turismo de Benidorm ante escenarios que pudieran considerarse adversos”.

Ha recalcado que “aunque pueda parecer que el 85,2% es un mal dato de ocupación, lo cierto es que pocos destinos pueden arrojar este balance con 40.000 plazas abiertas en esta época del año. Quizá Madrid con una Champions pueda haber superado este dato de ocupación media”.

Mayor ha apuntado también que “de momento parece que el Brexit no tiene efectos reales sobre los datos de ocupación, aunque se mantiene como una amenaza, así como el encarecimiento de combustibles, que puede afectar a la aviación”.

No se olvida tampoco de “la amenaza de la hotelización de las viviendas” por parte de operadores como Airbnb. Es un elemento “que sigue ahí y que día a día nos quita clientes y mercado como un goteo incesante. Hay que recordar que este nuevo actor ni contribuye ni sostiene al destino".