Filomena evidencia la incapacidad de respuesta en Barajas, según el Sepla
Publicada 14/01/21 16:37h
El temporal Filomena ha vuelto a poner en evidencia la incapacidad de respuesta y actuación de los gestores del Aeropuerto de Madrid-Barajas frente a adversidades climatológicas y desastres, poniendo en compromiso la operatividad del aeródromo y la propia seguridad aérea, a juicio del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) que exige explicaciones al Ministerio de Transportes, a Aena y a las autoridades aeroportuarias. La organización destaca que la mala planificación, las deficiencias en el limpiado y puesta a punto de las pistas y las calles de rodadura o la mala comunicación entre los entes involucrados han sido algunos de los fallos detectados por las tripulaciones que han tenido que volar durante estos días (ver: Madrid-Barajas regularizará las llegadas este jueves, según Eurocontrol).
En tal sentido, la organización señala que deben explicar el dispositivo que fue puesto en marcha para combatir los efectos del temporal sobre el tráfico aéreo y por qué resultó insuficiente para mantener el nivel operativo del aeropuerto, muy mermado respecto a su desempeño habitual debido a la pandemia de la COVID-19.
El sindicato ha pedido explicaciones a través de comunicaciones a los máximos responsables de las instalaciones para conocer de primera mano cuáles han sido las deficiencias y los errores de planificación y gestión que han desembocado en el mayor caos aeroportuario de los últimos años.
Sepla recuerda que los tres días de intensas nevadas en Madrid derivaron en el cierre total del tráfico aéreo en el primer aeropuerto del país, algo incomprensible para el sindicato de pilotos “debido a que Barajas compró hace 11 años, tras otra nevada de menor intensidad, material suficiente para afrontar un temporal de estas características cuando, sobre todo, se sabía con la antelación suficiente la intensidad y las consecuencias que dicho temporal podría tener”.
"Muchos de estos fallos no solo han tenido consecuencias en la operatividad del aeropuerto, sino también en la seguridad operacional de los vuelos que sí pudieron finalmente despegar. De hecho, el mal estado de las pistas produjo daños en el fuselaje de varios aviones, que llegaron a destino con roturas en un motor"
El Sepla refiere que "no es la primera vez que algo así ocurre en el aeropuerto de Barajas, aunque esta vez la incomprensión es total debido a la antelación y precisión con que se sabía la intensidad del temporal que se avecinaba". Agrega que, de hecho, el día 6 de enero se reunía un comité de crisis del aeropuerto para definir el dispositivo de la operación que iba a trabajar durante el temporal. A pesar de ello, el aeropuerto no puso a punto sus efectivos humanos y materiales en el momento de dar comienzo la nevada. Una pronta actuación hubiera evitado, sin duda, muchos de los daños ocasionados por el temporal.
“El aeropuerto de Barajas ha reaccionado de nuevo tarde, lento y mal, y ha vuelto a poner en evidencia unas deficiencias inexplicables para un aeropuerto de referencia internacional e importante hub de conectividad mundial” ha manifestado el presidente de Sepla, Óscar Sanguino
Paralelamente, el Sepla ha iniciado una investigación técnica con base en informes solicitados a los pilotos que han volado desde o hacia Barajas durante los últimos días, destacando que su intención es detectar los fallos más repetidos, para lo que ha solicitado a sus afiliados rellenar un formulario en el que se expliquen las diferentes situaciones vividas para proponer respuestas y soluciones para el futuro. Asimismo, la organización ha puesto a disposición de la Administración su experiencia técnica en los diferentes comités de seguridad de la red de aeropuertos de España.
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