La asociación de estaciones de esquí andorranas, Sky Andorra prevé pérdidas de entre el 12 y el 15% si las altas temperaturas y la falta de nieve impiden abrir las instalaciones durante el puente de la Constitución. Muchas confían en poder abrir la próxima semana.
La anulación de las reservas podría frenarse si las temperaturas siguen bajando y es posible trabajar en la formación de nieve artificial. El previsible cierre en estos días de primero de enero podría provocar grandes pérdidas en la cifra anual de ingresos en estas instalaciones. Así lo afirmaba la directora de Ski Andorra, Marta Rotés, quien cree que los ingresos podrían descender hasta en un 15%. Una situación que podría afectar también al sector hotelero de Andorra y a toda la oferta complementaria, pues ya se han cancelado algunas reservas de alojamiento.