Asolan alerta de que "la parálisis" que sufren Lanzarote y Canarias impide crear empleo
1 septiembre, 2010NOTA DE PRENSA REMITIDA POR ASOLAN
A colación de unas declaraciones recientes del presidente del Gobierno podría deducirse que a su juicio hay/existe poca colaboración empresarial en la creación de puestos de trabajo. A raíz de dicha reflexión queremos manifestar que los empresarios nos encontramos con numerosas y enormes dificultades, no sólo para avanzar y hacer crecer nuestras empresas y negocios, sino también para mantenerlas en esta época de crisis, y por tanto poder aumentar la plantilla de trabajadores.
Como asociación en Lanzarote que representa al empresariado turístico, queremos y debemos manifestar que nuestro mayor afán es la creación de puestos de trabajo, porque ello significaría que nuestras empresas gozan de buena salud, funcionan y crecen.
En particular en Lanzarote se vive una situación de parálisis. Clama al cielo que en pleno siglo XXI, ningún Ayuntamiento tenga aprobado definitivamente su Plan General, que el Cabildo Insular de Lanzarote tenga aún en fase de avance el PIOL y que el Plan Territorial esté aún sin aprobar.
Si miramos a nivel regional es tal la maraña de normas confusas, contradictorias y susceptibles de interpretación que es imposible dotar de la necesaria agilidad y seguridad jurídica, imprescindibles ambas para que cualquier iniciativa empresarial cuaje y contribuya de esta forma a la creación de puestos de trabajo. La lentitud con la que se tramitan los proyectos y permisos pertinentes frena la actividad empresarial. No es de recibo que un complejo turístico que decida rehabilitarse tarde mas de dos años en obtener los permisos de renovación; esto afecta negativamente no sólo al propio establecimiento sino también a otros sectores vinculados, como es el caso de la construcción, equipamientos, suministros, etc., y por ende, descorazona al empresario, que en lugar de sentirse estimulado se siente agotado antes de empezar.
Otro ejemplo de dificultad en los procedimientos administrativos se vislumbra con la transposición de la Directiva Bolkestein en el proyecto de Decreto de alojamiento de Canarias actualmente en trámite. Se pone de manifiesto la exigencia de autorización previa para el ejercicio de la actividad turística del establecimiento en lugar de la declaración responsable, siendo esto contrario al ordenamiento comunitario por no cumplir los requisitos establecidos en esta Directiva, que tiene como objetivo facilitar los trámites para la puesta en marcha de una empresa. Igualmente establece unas exigencias a los alojamientos mucho mas rigurosas que en el resto de los estados miembros, dejando al empresariado canario en peor condición que el resto de los países y comunidades autónomas. La normativa turística de otras comunidades autónomas ha suprimido la autorización previa por ser contraria a la Directiva europea y al mercado.
Otro tema muy grave donde las administraciones no están actuando es en la economía sumergida, que se cifra en cientos y miles de millones de euros. Una gran cantidad de empresas que trabajan de forma clandestina, no pagando impuestos y contratando personas de forma irresponsable, irrumpen en el mercado con precios desleales y en definitiva haciendo una competencia desleal a las empresas que operan en el marco de la legalidad, impidiendo crecer y por tanto contratar más personal.
En una isla como Lanzarote, donde el índice de desempleo supera el 30% y lidera el ranking regional, se hace más necesaria la intervención del Gobierno a la hora de dar mayor celeridad a estos trámites o de subrogarse en su caso aquellas competencias que no sean adecuadamente gestionadas por las instituciones locales.