Radiografía del viajero sostenible: así le afecta la tendencia Flygskam

Cliente en transformación

"Para la industria del turismo, responsable del 8% de la emisión de gases de efecto invernadero, la aparición de este nuevo perfil de consumidor representa un gran reto a superar", según apunta Criteo.

En este sentido, añade la citada empresa, "cada vez son más los hoteles, aerolíneas e incluso destinos turísticos los que aplican medidas sostenibles para sumarse a esta corriente y no perder la lealtad de un cliente que está en pleno proceso de transformación".

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Para las empresas turísticas y destinos, el reto no solo es ser más sostenibles, sino también considerar la sostenibilidad como un pilar para sus acciones de marketing

Según afirma Carolina Lesmes, directora comercial de Criteo para España y Portugal, “nuestra investigación demuestra que los viajeros españoles, sobre todo los más jóvenes, cada vez están más concienciados con el medioambiente y la conservación del planeta, por lo que es esencial que los proveedores de servicios turísticos conciban la sostenibilidad como un pilar importante a tener en cuenta en sus acciones publicitarias”.

La encuesta muestra además que "España se sitúa como el cuarto país con mayor número de viajeros sostenibles, por detrás de Alemania, Estados Unidos y Francia, y por delante de otros países como Reino Unido, Australia y Brasil".

Flygskam

Las repercusiones que significa esta tendencia para la industria turística serían de gran calado, si se tiene en cuenta que el 57% de las llegadas de viajeros internacionales a nivel global se basan en un modo de transporte: el avión.

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Según explica Pablo Díaz, profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC, viajar en avión contamina 20 veces más de lo que contamina el tren.

Así, las emisiones del avión son, en promedio, de unos 285 gramos de dióxido de carbono por persona y kilómetro volado, mientras que las de un tren son de 14 gramos de CO2 por persona y por kilómetro de media.

Así, "el movimiento flygskam pretende concienciar de lo contaminantes que son los desplazamientos aéreos frente a otros medios de transporte como el tren", apunta Díaz.

De los 82,6 millones de turistas internacionales que España recibió el año pasado, ocho de cada diez llegaron en avión. Los viajeros que usaron el tren apenas fueron el 0,4%