Baleària cierra 2021 con un beneficio de 49M€ superando su dato prepandemia
Balearia se propone alcanzar este año una facturación superior a los 500 M€ con la esperanza de que Marruecos reabra sus fronteras
Publicada 24/03/22 14:36h
Baleària ha salido de ‘números rojos’ al cierre de 2021, a pesar de ser un ejercicio aún marcado por la crisis COVID-19, reportando ganancias de 49 millones de euros, muy por encima de la pérdida de -15 M€ en 2020 e, incluso, del resultado del año previo a la pandemia, 2019, cuando registró un beneficio de 29 M€. Asimismo, ha registrado unos ingresos de explotación de 396 M€, aún por debajo de 2019, pero con un Ebitda de 103 M€ que superan los 83 M€ del año previo a la pandemia. Así lo ha anunciado en Palma de Mallorca el presidente de la naviera valenciana, Adolfo Utor, quien ha atribuido un balance tan positivo a que mantuvieron toda su flota operativa y al gran impulso del mercado español, volcado al turismo de proximidad, especialmente en las rutas con Baleares, debido a las restricciones a la movilidad, y el hecho de que el coste de la energía no les afectó durante al menos los tres primeros meses de 2020. Si bien afirmó que era muy difícil hacer previsiones en estos momentos, se mostró optimista de cara al presente ejercicio, en el que se proponen alcanzar una facturación de más de 500 M€ y un resultado de explotación similar al de 2021, si se reabre Marruecos y los precios del petróleo se estabilizan.
Utor ha afirmado que los resultados presentados "contribuyen a consolidar la solvencia, amortizar la deuda, fortalecer la caja y dar continuidad al plan de inversiones de Baleària", una empresa
En el lapso, la naviera transportó más de 2,91 millones de pasajeros -un +38% frente a 2020, pero aún un -34% en comparación con 2019- y 765.000 vehículos -+29% vs. 2020 y -28% vs. 2021-. Utor ha destacado que las restricciones ala movilidad afectaron de forma desigual a las rutas nacionales e internacionales.
En tal sentido, destacó que el año pasado, el 95% de su tráfico de pasajeros corresponde a rutas nacionales, en concreto, con Baleares, Ceuta y Melilla, mientras que, el tráfico en las rutas internacionales con el Norte de África y las Bahamas, que se vieron fuertemente afectadas por las restricciones a la movilidad, los pasajeros representan apenas el 5%. También incidió, especialmente, la cancelación por segundo año consecutivo de la Operación Paso del Estrecho, lo que provocó a la naviera una pérdida del 85% de los pasajeros respecto a 2019.
En estos momentos, Baleària dispone de 29 barcos, con los que opera 24 rutas en seis países. Su negocio mantiene un equilibrio entre el transporte de pasajeros (48%) y de mercancías (48%).
Competencia y sobreoferta
En cuanto al impacto de la entrada de nuevos competidores, la naviera italiana Grimaldi, que compró a Transmediterránea el negocio de sus rutas en Baleares, y GNV, del grupo MSC, Utor ha señalado que el principal efecto ha sido una sobreoferta en las rutas con la península en un contexto en el que la demanda permanece igual, lo que ha provocado una bajada en los precios.
"Ahora nos encontramos en medio de dos operadores transnacionales, con una fuerte operación de transporte de contenedores, y que han aumentado su oferta sin tener en cuenta el daño al medioambiente"
Agregó que se trata de grupos con músculo financiero, pero "la fortaleza de Baleària está en la calidad de su producto y servicio y la fidelidad de sus clientes, que son mayormente nacionales como esta empresa".
Apuesta por la sostenibilidad
Reiterando la apuesta de la naviera por energías verdes, el presidente de Baleària ha resaltado que, tras una inversión de 380 M€, en este primer trimestre de 2022, dispone de nueve buques con motores duales que les permite operar con gas natural licuado (GNL) y con combustible fósil, en caso de ser necesario, y combinar con un 10% de hidrógeno.
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En 2021, aumentó el uso de gas natural creció un 36%, lo que les permitió ahorrar la emisión de 56.000 toneladas de C02, a pesar de que en octubre se vio forzada a restringir su uso a las maniobras y estancias portuarias. “Se trata de una medida temporal que adoptamos por responsabilidad y para preservar la viabilidad de la compañía ante la escalada del precio de este combustible”, explica Utor.
Por otra parte, la puesta en marcha en mayo de 2021 del innovador fast ferry Eleanor Roosevelt, con motores duales a gas, "aúna esta apuesta por la sostenibilidad con otro de los ejes estratégicos de la naviera: la digitalización. Hemos seguido avanzando en el objetivo de convertir Baleària en una compañía guiada por el big data para tomar decisiones en tiempo real con la máxima eficiencia”.
De hecho, refirió que la naviera ya monitoriza su flota a través de la Torre de Control digital. Además, siete de sus barcos disponen de un sistema de sensores que recoge en tiempo real datos de navegación y consumo. Todo este proceso les ha permitido hacer mejoras en la experiencia del cliente, implantando asistentes virtuales o plataformas de entretenimiento a bordo.
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