El wifi llega a los aviones, la movilidad avanza

Hablábamos el otro día también del cloud computing como una posibilidad de descentralizar la oficina, el puesto de trabajo, pero en cierto modo hasta esta estrategia tiene la limitación de necesitar una herramienta y una conexión. Y es que aquí está la clave para la movilidad, por supuesto. Integrar un entorno conectado con un aparato que se pueda adjetivar como ?movible? es lo que están buscando ahora los profesionales. No olvidemos que éste es el mercado objetivo de este tipo de desarrollos, el formado principalmente por profesionales que buscan una conexión rápida y ubicua.
 
Ya hace unos años Martín Varvavsky lanzó el proyecto Fon que pretendía utilizar, previa autorización, las conexiones wifi de los particulares para crear una red global que permitiera el acceso desde cualquier lugar del planeta. La idea era y es hacer partícipes de los beneficios a todos aquellos que cedieran parte de su conexión wifi al proyecto. El proyecto sigue adelante y ha recibido financiación de Skype, Google y eBay entre otros.
 
Pero posiblemente uno de los mayores problemas que ha tenido este mercado de profesionales es el de ajustar esa necesidad de movilidad con los viajes, tanto en tren como en avión. En principio la solución en tren parece ser fácil, o bien se dispone de un teléfono móvil cada vez más adaptado, un smartphone, o bien se utilizan las conexiones wifi que ya RENFE ofrece en algunas redes como AVE y Altaria. Pero el problema estaba en los viajes en avión.

Reticencias en el aire
 
Hasta hace poco la utilización de teléfonos móviles y smartphones no estaba permitido, ahora algunas líneas han incluido esa posibilidad, aunque otras como Air Berlin todavía son reticentes. El problema del wifi hasta ahora ha sido su excesivo coste, a pesar de ello Lufthansa ya probó introducirlo en 2004 en algunas rutas. Parece ser que hoy en día ese problema ya ha sido solucionado.
 
Las líneas aéreas norteamericanas ya han generalizado el uso del wifi en sus vuelos. De momento utilizan la estrategia de incluirlo previo pago. La evolución debería ser igual que en los hoteles, un periodo inicial en el que el wifi es considerado un servicio que aporta valor al cliente, por lo que éste no ve el pago del mismo como algo ajeno al mismo, y posteriormente, tras su generalización, y su conceptualización como commodity, una paulatina disminución del precio hasta su gratuidad.
 
Algunos hoteles siguen apostando por el cobro del servicio wifi, posiblemente un error de estrategia que afecta a su imagen y que lo posiciona ante el cliente como un hotel ajeno a su tiempo y anclado en estrategias ya obsoletas.

La movilidad, estrategia ganadora
 
La movilidad es, lo hemos dicho, una de las estrategias ganadoras de este año y posiblemente los próximos. La profundización en este servicio y el hecho de facilitar a los profesionales entornos aptos para el trabajo y, por supuesto, a los no profesionales para el ocio, es y va a ser muy bien recibido por el cliente. No olvidemos que es lo que éste está demandando.
 
Juan Sobejano (juan.sobejano@hosteltur.com)