¿Los consultores somos la solución o formamos parte del problema?

¿LOS CONSULTORES SOMOS LA SOLUCIÓN O FORMAMOS PARTE DEL PROBLEMA?

A la vista del post de jgarciacuenca Investigación Comercial sobre las necesidades de las empresas Hoteleras y el comentario de mi buen amigo #1 eduardomartinez, no me ha quedado mas remedio que sacar a la luz, una duda que tengo desde hace muchos años.

Dado que he practicado la consultoría “free lance” por mi cuenta en España y Republica Dominicana, y en colaboración con ASEHS Asesoría y Gestión de Empresas de Hostelería S.L. de Jesús Felipe Gallego en Cuba, siempre como actividad complementaria de mi trabajo principal como Director de Hotel, aprovechando un periodo vacacional largo, etapas de Dirección de algún establecimiento de temporada, cuando no la interrupción temporal entre la dirección de un establecimiento y otro.

En los pocos trabajos "free lance" que he realizado, me han frenado la actividad de consultoría para reintegrarme en lo que es mi verdadero trabajo y vocación, LA DIRECCIÓN HOTELERA, la razón ha sido que la empresa para la que he realizado el trabajo de consultoría me ha pedido que ponga en marcha el proyecto que les presentaba, y hemos llegado a un acuerdo económico, comprometiéndome normalmente por un periodo de tres años a gestionar el proyecto y formar a mi lado al futuro Director que me sustituya.

Al integrarme como Director del establecimiento con plena dedicación, no puedo continuar de forma seria con otros trabajos de consultoría, por lo que la actividad consultora queda en “stand by” hasta una nueva oportunidad.

Puedo estar en un acuerdo muy matizado con algunas de las expresiones de Eduardo, ya que creo que es básicamente verdad cuando dice: "La mayoría de las empresas no están preparadas para afrontar los problemas a que lres enfrenta la gestión de las mismas, más en tiempos de crisis, y eso esta claramente demostrado a lo largo del tiempo, ¿cuantas han cambiado de manos a pesar de la gran rentabilidad que el turismo ha proporcionado?, pero ESE ES SU PROBLEMA, y a pesar de todo, la industria del turismo es la que mas aporta al PIB nacional.

Me llega la duda que da pie al título de este post “¿Los consultores somos la solución o formamos parte del problema?” y tengo que seguir matizando el pensamiento de Eduardo trasladado al comentario anteriormente señalado:

“Todos quieren SOMETHING a cambio de NOTHING. No están preparados para gestionar ni para comercializar, ni para investigar, ni para competir, NI PARA PAGAR A ALGUIEN QUE PUEDA COLABORAR CON ELLOS A HACERLO.”

Especialmente quiero fijarme en otro de sus pensamientos:

“Yo me ofrecí a trabajar sobre ÉXITO. No querían firmar acuerdo alguno. En otras palabras, SE CREEN MÁS LISTOS QUE NADIE. Consecuencia: SE QUEDAN ESTÁTICOS O SE ASOCIARÁN CON ALGÚN JILITONTO QUE NO LES RESOLVERÁ NADA.”

Mi pensamiento en este terreno es como ya he señalado antes ESE ES SU PROBLEMA, porque en mi actividad como consultor, me he encontrado con lo que dice, pero en ningún caso me ha condicionado.

Creo que el principal problema de gran número de empresas hoteleras, es que no tienen un DIRECTOR DE HOTEL al frente del establecimiento, muchas tienen ocupado ese cargo por personas universitarias, licenciados en ciencias económicas, empresariales, derecho, incluso psicología, con más de un MBA en prestigiosas universidades y/o escuelas de negocios nacionales o extranjeras, con tres o cuatro idiomas, altísima formación a la que han dedicado entre diez y quince años de su juventud, pero el problema, es que en la mayor parte de casos les falta la formación básica que da la MEJOR UNIVERSIDAD DE LA VIDA QUE ES EL PROPIO HOTEL.

La gran complejidad de la gestión hotelera, es muy difícil de hacerla frente de forma efectiva por parte de la mayor parte de consultoras, mientras estas oferten SOLUCIONES si lo que realmente dan son HERRAMIENTAS, el problema reside en que por bueno que sea el martillo LA HERRAMIENTA, si el carpintero DIRECTOR DEL HOTEL es manco, no habrá solucionado el problema.

Pienso que la consultoría en líneas generales es sumamente parcial en su enfoque, sea éste: comercial, marketing, nuevas tecnologías, administración, compras y almacén, control, formación, recursos humanos, selección, organización, etc., es muy difícil que ninguna empresa que necesite el concurso del consultor sea capaz de transmitir a éste sus necesidades reales, por la simple razón de que no las conoce.

Como ha señalado Eduardo, la mayoría de los empresarios son muy listos y saben mas que nadie, pero tienen un problema NO SABEN LO QUE NECESITAN y en ese dilema, no están dispuestos a pagar por algo que no saben si va a tener efectividad, porque

ningún CONSULTOR les proporciona un calendario con valoración de objetivos y resultados económicos,

ofreciendo en su lugar un cronograma de objetivos normativos sin garantías de resultados prácticos, que no van a depender de las herramientas que le ofrezca el consultor, sino de la estrategia y habilidad con las que pueda utilizarlas el DIRECTOR DEL HOTEL.

Cada establecimiento necesita una estrategia diferenciada que pueda irse adaptando a circunstancias en permanente cambio, muy difícil de definir en un gabinete de consultoría, que normalmente no esta integrado de forma permanente en el organigrama operativo de la empresa.

La solución la veo mas cercana a la figura del

DIRECTOR DE HOTEL = CONSULTOR HOTELERO

que se comprometa en la puesta en marcha del proyecto y la formación de los equipos que hayan de llevarlo a buen fin, con la ayuda de su equipo de colaboradores Jefes de Departamento y Mandos Intermedios del propio establecimiento, para que realice el trabajo de consultoría.

Al fin y al cabo, lo que se precisa es profesionalidad al más alto nivel en el equipo, si el equipo es mediocre, para salir del paso, no hay proyecto de consultoría capaz de ser sacado adelante.

Dificilmente tendrá solución el problema si se pretende una solución parcial del mismo, en lugar de hacerlo de manera integral, por principio y sin que ello permita pensar que séría la solución final, sino la adecuada a las circunstancias actuales, los estudios universitarios de turismo, debieran estar apoyados en un Hotel Escuela integrado en la propia Universidad para formar parte de la formación práctica de sus estudiantes.

¿Por qué es mejor solución un CONSULTOR EXTERNO (gran especialista en cualquier ramo de las disciplinas académicas) que un DIRECTOR DE HOTEL COMO CONSULTOR INTERNO (que sin ser tan especialista goce de los múltiples y complejos conocimientos realmente necesarios para dirigir un hotel)?

Quizá sea momento de que unos y otros dejemos de mirarnos al ombligo, creyendo que somos la solución, cuando realmente podemos estar formando parte del problema.

Creo que las continuas crisis del sector, afortunadamente en las del pasado sin gran impacto negativo real sobre nuestro sector, pero que han afectado en mayor o menor medida desde la década de los sesenta, con al menos un periodo problemático cada diez años.

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