Las medidas de Reino Unido hunden la recuperación del turismo británico
Publicada 10/08/21 -Actualizada 30/08/21 02:04h
Bloqueo a los viajes, semáforo COVID de destinos, cuarentenas y PCR al regresar a casa o apuesta por la staycations. La lista de obstáculos que ha implantado el Gobierno de Reino Unido a los viajes internacionales es larga, pero establece el contexto para entender por qué en España, entre los principales mercados el británico es el que arroja las peores cifras de recuperación respecto a los niveles prepandemia: en los seis primeros meses de 2021 solo se ha recuperado el 3,3% de estos turistas, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), que ofrece datos demoledores: de enero a junio de 2021 llegaron a España solo 273.333 viajeros británicos frente a los 8.288.927 que visitaron el país en el primer semestre de 2019.
En junio, el tradicional principal mercado emisor de turistas a España se situó en el cuarto lugar con respecto a llegada de turistas a España, con solo 142.507, muy por detrás de Alemania, con 500.010 viajeros, Francia (438.560 turistas) y Países Bajos con 147.312. En el mismo mes de 2019 España registraba algo más de dos millones de viajeros (2.074.006) procedentes de Reino Unido.
Así, en los primeros meses del año, con respecto a 2019, un año récord, la caída del turismo británico ha sido del 96,7%
Y es que las cifras cosechadas en estos primeros seis meses del año son irrisorias: en enero llegaron 23.217 turistas británicos, en febrero 14.319, en marzo 18.216, en abril 23.919, en mayo 51.155, mientras que en junio se experimentó una ligera mejoría, con los 142.507 citados anteriormente, según los datos del INE.
Y si bien la recuperación en este segundo año de pandemia aún está siendo débil en todos los mercados, las cifras del británico palidecen si se las compara con la de otros emisores: en el primer semestre se ha recuperado el 21,9% de los turistas alemanes que llegaron en 2019 y el 25,3% de los franceses.
En estos primeros seis meses se han registrado 1.169.657 turistas alemanes y 1.187.625 visitantes franceses frente a los 5.328.714 y 4.687.505 respectivamente que llegaron en el mismo periodo de 2019. Mientras, de enero a junio de este 2021 han llegado 273.333 viajeros británicos
Confianza del consumidor
Este año, la auténtica carrera de obstáculos que ha puesto Reino Unido a los viajes ha minado la confianza del consumidor, lo que se traduce en estas malas cifras del mercado británico, y en el peor de los casos ha arruinado los viajes de aquellos que se ha atrevido a irse de vacaciones.
Sin ir más lejos la pasada semana veíamos cómo la última actualización del semáforo COVID obliga a regresar a la carrera a unos 6.000 ingleses que se encontraban de vacaciones en Cancún tras pasar México a la lista roja de destinos.
No obstante, el hecho de que España se haya mantenido en la lista ámbar ha supuesto un cierto balón del oxígeno para el sector, ya que esta posición permite evitar una cuarentena de diez días al regresar a Inglaterra a las personas con la pauta completa de vacunación.
"Dado que ahora los viajeros completamente vacunados procedentes de la UE y EEUU pueden viajar al Reino Unido desde países ámbar sin el requisito de autoaislamiento, creemos que los viajes entre España y el Reino Unido continuarán recuperándose a un ritmo constante", explica a HOSTELTUR Kate McWilliams, portavoz de la agencia de marketing turístico Lotus
En este sentido, incide en cómo las últimas especulaciones de los medios sobre la posibilidad de que España hubiera pasado a la lista ámbar plus o la lista roja han hecho un flaco favor a la confianza del consumidor, por lo que la industria turística del Reino Unido "tendrá que trabajar muy duro para restaurar esta confianza y dar tranquilidad a los viajeros".
"A pesar de estos desafíos, España es el destino de vacaciones favorito del Reino Unido y existe mucha afinidad con el país. Sabemos que hay una gran demanda reprimida y la gente está ansiosa por regresar a España", asegura McWilliams
La portavoz de Lotus recuerda además que el Ministerio de Transportes del Reino Unido "aconseja" a los viajeros que regresen desde España presenten antes de su salida una prueba PCR siempre que sea posible.
"Si bien entendemos que esto no es un requisito legal, las pruebas de PCR son mucho más caras que las pruebas de antígenos, por lo que para algunas personas esto podría suponer una barrera adicional", constata.
Coste de los test
Precisamente, sobre el precio de los test, una encuesta realizada por Opinium revela que los británicos están dispuestos a pagar hasta 61 libras por persona de media por todas las pruebas requeridas para los viajes internacionales.
El coste de estas pruebas puede variar enormemente, según advierte MoneySavingExpert, que ha detectado precios de hasta mil libras para una familia de cuatro personas.
Por su parte, el periodista especializado Simon Calder también pone de relieve a través de un sondeo en las redes sociales que un 46,1% de los turistas británicos defiende que se opte por el test de antígenos a su regreso desde España, frente a solo un 7,7% que aboga por la PCR
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