Cadena de Favores
23 septiembre, 2009 (22:16:31)Como nativo digital que soy, cuando yo comencé a trabajar corría el año 2000. Por aquel entonces ya contaba con portátil, conexión a Internet, dos correos electrónicos (personal de mixmail y el de trabajo), y me regalaron un móvil a las pocas semanas (invento que en su momento me pareció una solemne majadería, todo hay que decirlo).
En lo que respecta a la parte tecnológica, mas allá de los avances en ciertas tecnologías (ordenadores mas rápidos, conexiones mas veloces, y movilidad básicamente) tampoco ha cambiado mucho el panorama...Sin embargo, hay un punto de inflexión que ha revolucionado la forma en la que nos relacionamos y desarrollamos la actividad laboral.
LA COLABORACIÓN, si, con mayúsculas.
Aquellos años de individualismo corporativo, secretismo y ocultismo empresarial, de "trepas" y competencia desmedida con tus compañeros, han quedado ya muy atrás y se ve como algo "demodé".
Gracias a la accesibilidad y facilidad en las comunicaciones las personas se han puesto en contacto, hablan y establecen relaciones en redes sociales que quizá haya gente que todavía no entiende...pero es una realidad de ayer. Esta manera de relacionarse, personal y sincera, ha traído de forma natural la colaboración horizontal, entre iguales, sin escalas ni jerarquías.
Antes ayudabas a tu círculo de confianza, que se reducía a pareja, amigos, familia, y algún compromiso conocido...era tu círculo de amistades y solo te debías a ellos.
Hoy en día, tu círculo de confianza no conoce fronteras gracias a Internet, y si antes podías echar una manita al primo de tu amigo, ¿por qué no hacerlo con alguien que has conocido vía twitter? ¿cual es la diferencia?
Yo lo veo como una cadena de favores: ayudar por el simple hecho de que te ayuden cuando lo necesites, colaborar por el simple hecho de compartir información que seguro te resultará útil en cualquier momento. Ayudar sin esperar nada a cambio, como con el primo de tu vecino que no conocías...TODOS ganamos, TODOS nos beneficiamos.
A través de LinkedIn y redes sociales he ayudado a promocionar la empresa de azafatas de una amiga, aprovechando los contactos en el sector. He echado una mano a comercializar una empresa de organización de eventos porque ofrecía un valor añadido, era diferente, lo valía. Encontré mi actual trabajo, donde estoy feliz porque tengo la oportunidad de ayudar a más personas, de aportar mi granito de arena a un sector que lo necesita.
Esto tampoco es un hecho nuevo, pero sí se está volviendo algo cotidiano.
*Un Kit Kat: Mi "contrincante", enfermera ella, en una visita a un centro de rehabilitación de toxicómanos (creo recordar...) me contó que es muy común que este tipo de centros cuenten con una rutina como parte del tratamiento que llaman "Cadena de Favores". Los trabajadores del centro ayudan a éstas personas con su problema, involucrándose y apostando por ellos. Una vez comienzan a mejorar, la mayoría desarrollan un deseo irrefrenable de agradecimiento, y necesitan de alguna forma devolver el favor al personal que tánto les ha ayudado cuando lo necesitaban. El centro lo único que les pide a cambio es que devuelvan el mismo favor, haciéndose cargo ellos mismos de los cuidados de las mascotas del centro, normalmente perros abandonados que recuperan de calle o de las perreras locales, y criando perros guía para la ONCE, aquellos que luego ayudan a los invidentes a manejarse con menos miedo.
Gracias a la colaboración entre unos y otros, muchos son los que se benefician directa o indirectamente...y gracias a Internet y las redes sociales ayudar es más fácil y accesible.
Colaboremos !
Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta
Inicia sesiónEsta opinión no tiene comentarios.