Facturas eléctricas elevadas, escasez de suministro y productos por las nubes, un combo explosivo

El desafío de no tocar la calidad de los hoteles, aunque los costes suban

Publicada 15/11/21 -Actualizada 10/12/21 02:06h
El desafío de no tocar la calidad de los hoteles, aunque los costes suban
  • "La falta de suministros y el encarecimiento de los costes es verdaderamente preocupante", dice el VP Marketing & Contracting de RIU Hotels
  • Los departamentos de compras de los hoteles "están volviéndose locos" para que la falta de productos no perjudique la calidad del servicio
  • La rentabilidad hotelera se verá impactada porque el contexto de pandemia no ayuda a trasladar a las tarifas el aumento de los costes

La crisis energética que azota Europa es nueva amenaza para el sector turístico, porque al aumento de la luz se ha sumado el del gas y esos incrementos se han trasladado a los productos que consume el hotel y no puede reemplazar. Y por si eso fuera poco, las cadenas también están sufriendo la falta de suministro de materiales en distintos puntos del mundo. Este combo impactará en la rentabilidad de la empresa este año y en 2022, ya que como ha explicado Senén Fornos, VP Marketing & Contracting de RIU Hotels & Resorts, en un contexto como el actual “no vamos a ser capaces de subir los precios de tal manera que podamos compensar el aumento de costes”.

El 1 de junio entró en vigor la nueva metodología de cálculo de la factura eléctrica, lo cual se ha traducido en un aumento del precio de la energía, en un cambio en los periodos tarifarios y eso ha generado la indignación de los hoteleros, porque la factura se ha más que duplicado.

Como ha ido informando HOSTELTUR, en el mes de octubre los aumentos en la electricidad dispararon la inflación al 5,5%, la mayor subida desde 1992. También se produjo un aumento en los carburantes y todo eso ha impactado en los precios finales de los productos de consumo.

Pero no es lo único, el incremento de la tarifa de luz ha limitado la elaboración de algunos productos y a eso también hay que sumarle la crisis mundial de transporte que afecta al comercio internacional y por ende repercute en el suministro. Todo este combo no hace más que golpear la rentabilidad de las cadenas hoteleras.

“La falta de suministros y el encarecimiento de los costes es verdaderamente preocupante", reconocía Senén Fornos al participar del Tourism Innovation Summit en Sevilla, aunque remarcando que como cadena harán todo lo posible para que eso no impacte en la calidad del servicio que ofrecen en sus hoteles

Panel compartido por Senén Fornos (Riu Hotels & Resorts) y Helena Murano (CaixaBank Hotels & Tourism)

“La crisis de los contenedores está haciendo que no llegue trigo y el trigo que llega lo pagamos un 60% más caro. Imaginen la cantidad de tostadas que hacemos por la mañana, por ejemplo, en el RIU República que tiene 1.100 habitaciones o en el RIU Chiclana que en el verano tenemos cerca de 2.400 personas. La cebada de la que sale la cerveza también está un 60% más caro”, ha comentado Fornos.

Y también “ha subido muchísimo” el precio del hierro para construir y en RIU Hotels & Resorts “tenemos varios proyectos”.

El problema no está solamente en el aumento de precios, también está la dificultad para trasladar productos en destinos donde el acceso es limitado. Un ejemplo es Maldivas, donde llevar comida fresca implica una logística particular.

“Toda la comida fresca, como frutas o verduras, va en cajas de poliespan y no hay cómo hacer las cajas en las que se transportan los productos, porque no hay poliespan”, ha comentado Fornos.

“Nuestro departamento de compras, y el de otras compañías, está volviéndose loco para conseguir suministro para garantizar el servicio, lo cual es muy serio”, ha remarcado Senén Fornos

Pero ha dejado en claro que pese a las dificultades “a nivel de presupuesto nos hemos planteado no tocar la calidad de los hoteles, aunque nos suban los costes”

Dificultad para trasladar a las tarifas los costes

“Los hoteleros hicieron un ejercicio tan importante de contención de gastos y de adelgazar los costes que pensábamos que si se recuperaba el turismo, como parecía, se conseguiría mayor rentabilidad que la que tuvieron en 2019 con los mismos ingresos. Sin embargo, ha venido esta historia y nos ha trastocado la idea”, comentó Helena Murano, Directora de CaixaBank Hotels & Tourism, quien compartió panel en con el VP Marketing & Contracting de RIU Hotels & Resorts.

Como se publica en RIU: "Si nada se tuerce, en 2022 podremos conseguir los ingresos de 2019", Senén Fornos ha explicado que aunque “este año ganaremos algo de dinero, que es importante”, el aumento de la luz y la falta de suministros impactará en la rentabilidad.

El problema está en que “no vamos a ser capaces de subir los precios de tal manera que podamos compensar el aumento de costes, por lo cual tendrá un impacto directo en nuestro GOP, que nos preocupa mucho”

Si la crisis de suministro se resuelve en el primer trimestre del año, "ya será muy difícil que podamos recuperar la rentabiliad, pero en el espíritu con el que hacemos los presupuestos, en la mentalidad con la que trabaja el equipo de dirección, en el área de ingresos y en el de compras, nuestra idea es que no pasemos del 2023 sin recuperar la rentabilidad".

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