Desde THR reclaman más presión del Gobierno y la Unión Europea a Boris Johnson

Semáforo: hoja de ruta para que las islas pasen a la lista verde

Publicada 09/06/21 -Actualizada 05/07/21 02:02h
Semáforo: hoja de ruta para que las islas pasen a la lista verde
  • Piden un estudio que demuestre que los turistas que han pasado vacaciones en las islas regresan sin COVID
  • Bordas pide la "suficiente presión" del Gobierno español y de Bruselas al primer ministro británico
  • Llama a evitar la aparición en los medios ingleses de imágenes de grandes grupos de personas en botellones

El pasado jueves Reino Unido anunciaba que Canarias y Baleares no pasaban a la lista verde de su semáforo COVID de viajes, tras mantenerse en ámbar junto al resto de España. Una noticia demoledora para el sector turístico dado que supone retrasar al menos tres semanas más la llegada del primer mercado emisor de turistas extranjeros y por tanto, el inicio de la ansiada recuperación económica. Si bien desde el Gobierno británico días antes se habían lanzado mensajes señalando que se estudiaba considerar la situación de las islas por separado, la realidad ha puesto de relieve que aunque Canarias y Baleares cuentan con una mejor situación sanitaria que Reino Unido, no se diferenciarán de momento de España, que globalmente cuenta con peores datos. Así las cosas, ¿qué pasos se pueden dar en esta tres semanas para lograr que estas CCAA pasen a la lista verde en la próxima revisión? Eulogio Bordas, presidente de THR, perfila la hoja de ruta a seguir y detalla todo aquello que debe evitarse si queremos que Londres saque a las islas del ámbar. "Lo cierto es que una buena parte de la solución está en nuestras manos y ahí radica el principal problema", apunta Bordas. (Ver Así queda el semáforo COVID: "Inglaterra está perdiendo amigos rápidamente", Con España en ámbar el turismo deja de ingresar 386 M € a la semana y Esperando al inglés).

Si bien Bordas tiene claro que aún quedan cosas por hacer para que las islas puedan entrar en la ansiada lista verde, también viene a confirmar las sospechas de buena parte del sector turístico británico de que ese semáforo tan limitado de destinos en verde viene a ser un movimiento deliberado del primer ministro, Boris Johnson, para conseguir que los británicos se queden en casa este verano y pasen sus vacaciones en el propio país. (Ver El Gobierno británico insta a la población a quedarse en casa en vacaciones).

"Johnson pretende apoyar a su industria turística, muy tocada también, tratando de que haga una mejor pretemporada y tal vez mejor temporada. Veremos cuánto aguanta la presión de las compañías aéreas y turoperadores que en muchos casos tienen en España el 50% de su negocio", señala

No obstante, las previsiones en THR se decantan por el optimismo y apuntan a que en julio Reino Unido podría reducir en buena medida las restricciones a los viajes a Baleares y Canarias pasándolas a la lista verde. ¿Qué se puede hacer desde el Gobierno y las islas para asegurarse que así sea? Bordas apunta la estrategia a seguir:

Qué ayudará a que se libere el tráfico

  • Unas estadísticas creíbles de que las islas tienen la COVID-19 bien controlada. En este punto, el presidente de THR defiende que "un certificado internacional sería más efectivo que las estadísticas nacionales".
  • También sería positivo un estudio que demuestre que la práctica totalidad de turistas que han pasado vacaciones en las islas regresan de ellas sin problemas.
  • Otro factor a tener en cuenta es la "suficiente presión" del Gobierno español. "En un caso así, [el presidente francés] Emmanuel Macron, probablemente, haría un viaje relámpago a Londres personalmente", apunta Bordas, que señala que esta situación "no la arregla el jefe de Oficina Española de Turismo en Londres, si la intención de Johnson es proteger a su industria".
  • También sería de ayuda que Bruselas, "en defensa de los intereses de España, Francia, Italia, Grecia, etc", presionara debidamente al primer ministro británico.

Del mismo modo, Bordas señala todo aquello que se debe evitar:

Turistas británicos a su llegada al aeropuerto de Heathrow. Foto: EFE.

Qué puede dificultar que se libere el tráfico

  • Unos malos datos de COVID-19 van a dificultar el pase de las islas a la lista verde. De este modo, explica que si España arroja malas cifras epidemiológicas y salen a la luz disputas entre regiones y organismos "esto aumenta la percepción de riesgo y da fuerzas a Johnson". A día de hoy la Incidencia Acumulada (IA) en España se mantiene estancada en los 115 casos por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, lo que daría argumentos al premier para seguir rechazando diferenciar a las islas.
  • El presidente de THR también considera negativo que el primer ministro británico vea que sus decisiones populistas, tan nocivas para España, "van a salirle gratis en sus relaciones con España, la Unión Europea y los ingleses residentes en nuestro país". Es decir, que no se actúe en consecuencia.
  • Bordas también llama a evitar la aparición en los medios ingleses de imágenes de grandes grupos de personas ejerciendo malas prácticas en materia de reuniones, como botellones. Unas imágenes que lamentablemente desde que se levantara el estado de alarma en Baleares ya han empezado a verse desde el pasado jueves en playas y barrios de Palma.

"No es fácil prever cómo evolucionaran estas fuerzas en los próximos veinte días. Nosotros en THR estamos un poco más en el lado optimista que en el pesimista. Pero ya veremos. Lo cierto es que una buena parte de la solución está en nuestras manos y ahí radica el principal problema", concluye Bordas

Para comentar, así como para ver ciertos contenidos de Hosteltur, inicia sesión o crea tu cuenta

Inicia sesión
Comentarios 1
Según el semáforo europeo, Baleares está en naranja y Canarias en rojo. El camino para convencer al gobierno británico de que pase las islas al verde es que se sitúen en el verde del semáforo europeo (IA-14 inferior a 25 y positividad por debajo del 4%), tener un sistema de prevención y vigilancia en marcha, similar al que tienen, por ejemplo, en Nueva Zelanda, en Taiwan o en Singapur, que permite tener bajo control esos dos parámetros; y control para impedir que el virus entre o salga de las islas de forma descontrolada (pruebas negativas para entrar, más una prueba a los 3 días y prueba justo antes de la salida). Con todo ello, se pueden establecer corredores con alto nivel de seguridad sanitaria. Esa es la parte técnica. También estoy de acuerdo con lo que propone el Sr. Bordas, especialmente con la necesidad de que, además, políticos valientes presenten la solución, gestionen y presionen en el Reino Unido con determinación, hasta conseguirlo. Pero todavía está por ver si tenemos alguno/a, porque hasta ahora no pasa ninguno del nivel de muy flojo.